La pandemia del COVID-19 golpea a México, como país que tiene una situación muy frágil de su población en lo que respecta a su salud mental, por lo que es probable que, en estas semanas y en las posteriores a la crisis, se incremente el número de personas que viven con ansiedad, depresión y también, tristemente, el número de personas que intenten suicidarse o que logren cometer suicidio.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Hogares (ENH, 2017), en México, de 98.3 millones de personas mayores de 12 años que había en esa fecha en el país, 54.35 millones manifestaron haberse sentido preocupadas o nerviosas (55.28%). De esa suma, en 10.17 millones de casos, la sensación de nerviosismo o preocupación es “mucha” (10.34% del total).
Entre quienes manifiestan sentir nerviosismo o preocupación, únicamente 2.86 millones afirman tomar medicamentos como ansiolíticos, a fin de reducir o controlar los sentimientos descritos.
De acuerdo con la misma ENH, 2017, de los 109.28 millones de personas mayores de 7 años que había en esa fecha en el país, 33.38 millones manifestaron haberse sentido deprimidas al menos una vez. 13.4 millones son hombres y 19.97 millones, mujeres.
De esa suma, 3.85 millones declararon sentirse deprimidas a diario (11.53% de quienes se han sentido deprimidas); 3.85 millones declararon sentirse deprimidas semanalmente; 3.8 millones declararon sentirse deprimidas una vez al mes; mientras que 22.84 millones declaran sentirse deprimidas una vez al año.
De acuerdo con las estadísticas de mortalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el año 2018 hubo seis mil 808 personas que cometieron suicidio. Destaca que, de esa suma, en cuatro mil 921 casos el evento ocurrió en la casa de la persona fallecida (72.28%); y que en cuatro mil 121 casos el método utilizado para quitarse la vida fue el ahorcamiento, estrangulamiento o sofocación autoinfligidas.
En segundo lugar, respecto del lugar de ocurrencia del suicidio, el segundo en magnitud, con 533 casos, son los categorizados como “otro lugar no especificado”; mientras que en 381 casos el lugar de ocurrencia del evento fue una calle, avenida o carretera.
De acuerdo con el Inegi, entre 2009 y 2018 se han suicidado 59 mil 859 personas; de éstas, 48 mil 473 eran hombres (80.9%), y 11 mil 386 eran mujeres (19.1%).
Debe destacarse que, respecto de los diez años previos, ese porcentaje es mayor pues entre 1999 y 2008, el porcentaje de suicidios de mujeres, respecto del total, representó 16.9%.
Lo es también respecto del porcentaje registrado entre 1990 y 1998 en el que el peso relativo de los suicidios de mujeres respecto del total fue de 15.29% en la República mexicana.
Según el Inegi, en el 2018, de los 6,808 suicidios registrados, los grupos de edad donde se concentra el mayor número de casos es el de menores de 19 años, y el de 20 a 24 años de edad. En el primero, la suma fue de mil 29 (229 tenían entre 10 y 14 años, y 800 de 15 a 19); en el segundo, la suma fue de 1,035. En conjunto, suman 2,064 casos que representan el 30.3% del total.
Frente a estos datos, es evidente la urgencia de intervenir, pero ya, a fin de atender la salud mental ante las emergencias sanitaria y económica que tenemos enfrente.
Fuente: Excélsior