Las funerarias en la Ciudad de México en esta contingencia sanitaria también han padecido el colapso de los crematorios para la incineración de personas que fallecen principalmente por Covid-19.
Los 22 hornos de cremación por parte del Gobierno de la Ciudad de México ya están a su máxima capacidad.
“No están siendo suficientes, tenemos el problema muy grave ya que los hornos del gobierno no trabajan 24 horas y los horarios que ellos tienen son muy reducidos, la capacidad de los cuerpos nos ha rebasado y esto es alarmante y preocupante para nosotros, contamos con el apoyo de crematorios particulares que tienen un poquito más de margen en opción paa trabajar más tarde y apoyarnos, pero aún así no nos estamos dando abasto», detalló la señora virginia Ramírez Franco, propietaria de funerarias Gris e Hispano Americano.
Ante ello, los funerarios piden al Gobierno de la Ciudad de México que los apoyen abriendo los crematorios oficiales de los panteones como el de San Nicolás Tolentino, el panteón San Isidro o el del 20 de Noviembre con horarios nocturnos ya que argumentan que es tanta la demanda de defunciones que ya se está saliendo de control.
Señalan que ellos seguirán trabajando con las medidas establecidas por la Secretaría de Salud conforme al protocolo de seguridad y manejo de personas fallecidas por coronavirus, en espera de que haya más amplitud de horarios y crematorios disponibles para su labor.