Existe un riesgo latente de que estudiantes mexicanos ya no regresen a las aulas una vez que termine la contingencia por el covid-19, pero además de que se empleen en el mercado ilegal ante la crisis generada por la pandemia de covid-19, advirtió José Antonio Pérez Islas, coordinador del Seminario de Investigación en Juventud (SIJ) de la UNAM.
Durante su partición en el webinar Qué relación existe entre trabajo precario, evaluación justa y deserción escolar en tiempos de pandemia, Pérez Islas explicó que la historia de las crisis muestra que los primeros en ser despedidos de sus empleos son los jóvenes y también los últimos en recuperarse.
Vamos a ver un incremento no solamente de empleos precarios, sino yo diría de la posibilidad de que (los jóvenes) busquen opciones en el mercado paralegal o ilegal directamente”, alertó Pérez Islas.
Esta condición que nos ha generado la pandemia hace que quizá muchos muchachos y muchachas ya no regresen a la escuela, una de las cosas que no sabemos es qué está sucediendo con todos (los niños y jóvenes) que se quedaron fuera de la comunicación ‘internética’ por sus condiciones de pobreza, por el asunto de la conectividad, no sabemos qué va a pasar con ellos y es un asunto que nos debe preocupar centralmente”, dijo.
Por su parte, Vernor Muñoz, extelator de Educación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), planteó que los sistemas educativos no estaban preparados para enfrentar una crisis como la que generó la pandemia de covid-19, lo que vino a profundizar las ya existentes desigualdades en América Latina.
La brecha digital que estamos enfrentando es muy evidente; en el caso de América Latina se calcula que sólo 36 por ciento de los habitantes de la región tienen acceso a una computadora y 45 por ciento tiene acceso a internet. Esta brecha digital lo que ha producido es una profunda exclusión, un marcado abandono de parte de estudiantes de sus estudios y que ha impactado principalmente a personas con discapacidad y habitantes de las zonas rurales que han sido tradicionalmente afectados”, expuso.
Hemos visto, además, cómo la situación de pandemia ha agravado el trabajo infantil, ha agravado la explotación sexual, el embarazo temprano, el matrimonio de las niñas y se ha reportado también un aumento exponencial en violencia sexual contra niñas, niños y adolescente dentro de los hogares”, lamentó.
Fuente: Excélsior