Hay más de 1.8 millones de trabajadores, entre los sectores de construcción, minería y automotriz, que se preparan para volver a sus centros de trabajo en los siguientes 15 días. Pero lo deberán hacer en el marco de la nueva normalidad que el COVID-19 está marcando, y en algunos casos se ha optado hasta por la instalación de mamparas en líneas de producción para evitar posibles contagios.
Las empresas de estos tres sectores ya se preparan para ello, y adecuan las medidas y protocolos exigidos por las autoridades federales para poder operar. Entre estas se encuentran el uso permanente de cubrebocas en las áreas de trabajo, así como la medición de la temperatura corporal, en algunos casos hasta dos veces al día a cada empleado, además de la desinfección de manos antes de entrar a las instalaciones.
En el caso específico de la industria automotriz, en aquellos casos donde es imposible que se mantenga la distancia social estipulada, por encima de 1.5 metros entre personas, hay compañías que han instalado mamparas en sus líneas de producción para evitar posibles contagios entre sus empleados.
También han optado por controlar el acceso y salida de personal de las instalaciones, para evitar las aglomeraciones de personas en dichos puntos. En las entradas aquellos trabajadores que presenten temperatura por encima de los 37.5 grados serán instruidos para que acudan a un médico para verificar su estado de salud; de igual forma los colaboradores con síntomas relacionados con afecciones en el sistema respiratorio.
Para aplicar de la manera más efectiva posible las medidas de distanciamiento social, los horarios para las comidas también han sido separados, y en los comedores se han clausurado lugares para que se mantenga la sana distancia.
Y estas medidas no aplican sólo para el personal de las plantas, en el caso de las compañías automotrices, sino también para los proveedores y visitantes a las mismas. Medición de temperaturas, lavado de manos, uso de tapabocas, y hasta el llenado de cuestionarios, con por lo menos tres días de antelación, para conocer el estado de salud de los visitantes, así como su historial de viajes, son algunos de los requisitos que están instruyendo las empresas.
Todas estas acciones que está adoptando el sector privado deberán pasar a revisión por parte de las secretarías de Salud, Trabajo y Previsión Social y Economía, para que finalmente obtengan el visto bueno para comenzar operaciones el próximo 1 de junio.
Este 15 de mayo, la Secretaría de Salud publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) unas modificaciones al acuerdo publicado un día antes, 14 de mayo, en el cual se establecen la estrategia para el regreso a las actividades económicas, sociales y educativas, previsto para el 18 de mayo.
Pero estas dos semanas no serán tiempo perdido, pues la instrucción a las empresas es que se tomen los días para preparar los protocolos sanitarios necesarios para cada una, así como la capacitación de personal y adecuación de espacios.
Mamparas, suministro diario de cubrebocas, y máscaras en los casos que sea necesario, suspensión de capacitaciones, mantener espacios ventilados, desinfección diaria de todas las áreas de operación, y hasta la adecuación de urinarios y bebederos de agua accionados con los pies, entre otros.
Fuente: Heraldo de México