Es la peor Semana Santa que se ha registrado en México. La temporada del año en la que el sector turismo espera generar ganancias se ha convertido en una pesadilla.
“Las playas están cerradas. Acapulco está a 5 por ciento y Puerto Vallarta a 8 por ciento de ocupación. Se cayeron la reservas”, dijo Jorge Hernández, presidente de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes.
Para el gremio de hoteles independientes, la ocupación promedio será de 3 por ciento en el país.
“Abril es una de las temporadas turísticas más altas y está todo solo”, dijo Rafael García, presidente de la Comisión de Honor y Justicia de la Asociación de Mexicana de Hoteles y Moteles.
En el peor de los escenarios económicos por el COVID-19, la Universidad Anáhuac y el Consejo Nacional Empresarial Turístico estiman que la actividad de los viajes caiga hasta 80 por ciento, con una reducción en los ingresos del sector de casi 240 mil millones de pesos.
“Se trata de la peor Semana Santa en la historia del país. No están abiertos los hoteles porque el turismo no es considerado como una actividad esencial”, dijo Nathan Poplawsky, nuevo presidente de la Canaco.
Fuente: Heraldo de México