Una decena de trabajadores de Hospital Rural IMSS-Bienestar fueron retenidos en el municipio de San Idelfonso Villa Alta, en la región de la Sierra Norte de Oaxaca, por orden de la autoridad municipal, quien determinó cercar el pueblo “como medida de prevención para evitar posibles contagios de Covid-19”.
A través de una carta, ocho doctores y doctoras, una anestesióloga y una laboratorista, pidieron ser rescatados, pues al intentar salir de la localidad la madrugada de este jueves personas de la comunidad los obligaron a bajarse del vehículo que habría de trasladarlos a la ciudad de Oaxaca, lugar de donde son originarios.
En la misiva enviada al secretario general de la Sección 28 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social, Carlos Mario Aragón Ziga, demandaron su atención urgente ante la “grave situación que acontece en la población”, ya que no tendrían acceso ni les permitirían la salida.
“Tememos por nuestra seguridad e integridad física al momento de viajar, por lo que le solicitamos su apoyo para que se le informe a la autoridad municipal que no tiene porque restringir el acceso a la entra y salida de la comunidad al personal del hospital, ya está violando el libre tránsito”, señalaron.
Asimismo, exponen, el personal médico ha sido objeto de actos discriminatorios por parte de la comunidad, pues presumen “están contagiados” o «pueden contagiar a la población”.
Incluso, denunciaron, les han negado la adquisición de productos básicos para la alimentación y aseo.
De igual manera mencionaron que dos doctora han sufrido presuntos actos de acoso y discriminación por supuestos infundados, pues a una de ellas la desalojaron de la vivienda que alquilaba, y a otra, la agredieron en el comedor comunitario.
A más de 12 horas de la retención del personal médico para conseguir su liberación y salida del pueblo zapoteco de Villa Alta, la Secretaría General de Gobierno no ha prosperado en la conciliación, por lo que solicitó la intervención de la Fiscalía General de Justicia del Estado.
“Nos sentimos amenazados, inseguros y con amplias posibilidades de ser agredidos tanto por la comunidad, como por todas las comunidades aledañas donde ya se dio la indicación que se cierre el paso al personal médico del hospital”, expresó un médico retenido en la clínica del IMSS.
Fuente: Excélsior