El Reino Unido ha registrado en una jornada 621 nuevas muertes por COVID-19, algo por debajo de las 708 de las que informó ayer el Ministerio de Salud, y 5 mil 903 nuevos contagios, mismos que ascienden a 47 mil 806.
La cifra total de decesos en el país divulgada este domingo, 4 mil 934 personas, contempla a aquellos pacientes ingresados en hospitales que murieron hasta las 16:00 h de ayer, después de haber dado positivo en un uno de los 195 mil 524 test que ha realizado hasta ahora la sanidad pública.
El ministro de Salud, Matt Hancock, alertó este domingo que el Gobierno se planteará endurecer las condiciones del confinamiento si una parte de la población opta por no “obedecer las normas” que se han dictado.
Los ciudadanos en Reino Unido deben quedarse en casa si no es para ir a trabajar -en caso de no poder hacerlo de manera remota-, comprar, ir al médico o hacer deporte.
El buen tiempo que se ha registrado este fin de semana ha llenado los parques de personas caminando, corriendo y montando en bicicleta, actividades que están permitidas, pero la policía ha tenido también que dispersar a grupos y alertar a personas tomando el sol en espacios públicos, lo que está prohibido durante el confinamiento.
“Si no quieren que nos veamos obligados a dar el paso de prohibir el ejercicio por completo fuera de sus casas, deben obedecer las normas”, afirmó Hancock en una entrevista con la BBC.
En Escocia, la policía lanzó una advertencia a través de Twitter a la consejera médica del Gobierno regional, Catherine Calderwood, después de que la prensa revelara que ha ido a pasar el fin de semana a su segunda residencia, en la costa, contra sus propias recomendaciones.
La reina Isabel II ofrecerá esta noche un discurso a la nación para abordar la crisis del coronavirus, una inusual intervención que la soberana, de 93 años, ha reservado en las últimas décadas para momentos de especial gravedad.
En un fragmento de su alocución adelantado por el palacio de Buckingham la monarca llama a los británicos a resistir en estos momentos de “dolor” y “enormes cambios”.
Fuente: EFE