El presidente Andrés Manuel López Obrador inicia este viernes su primera gira de trabajo al interior de la República luego que la Secretaría de Salud decretó la Fase 2 del coronavirus en México. Como sucedió el fin de semana pasado en Oaxaca, en el evento no habrá más de 100 personas.
López Obrador visitará este viernes el municipio de Bahía de Banderas en Nayarit, para supervisar avances del programa Mi México Late, de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (Sedatu).
Esta semana, la Secretaría de Salud federal informó que la propagación del COVID-19 se encuentra en la Fase 2 con 585 casos confirmados, ocho personas fallecidas y al menos 2 mil 156 casos sospechosos, por ello las autoridades sanitarias establecieron que se suspendan las actividades no prioritarias del gobierno federal.
De igual forma, la dependencia ordenó que adultos mayores y personas con enfermedades crónicas, como diabetes o hipertensión, se ausenten de sus trabajos con salario y garantías garantizados.
En AICM recibirán al presidente con control sanitario.
Luego de encabezar la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, el mandatario federal se trasladará al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) donde se encontrará con un dispositivo sanitario de seguridad para poder acceder a las puertas de embarque.
En el punto de control se realiza un cuestionario donde se piden datos personales como: nombre completo, correo electrónico, número de vuelo y asiento, y se hacen preguntas relacionadas con los síntomas del coronavirus.
Si el pasajero manifiesta tener tos, estornudos y dolor de cabeza inmediatamente es separado del grupo y atendido por especialistas para descartar que se esté enfermo. Adicionalmente se toma la temperatura con dispositivos electrónicos.
Para poder ingresar al avión, es indispensable que el pasajero entregue a los encargados del vuelo el cuestionario donde manifiesta no tener síntomas semejantes al causado por el virus COVID-19.
En tanto, las instalaciones del aeropuerto capitalino lucen con poca afluencia y se observa a los viajeros con cubrebocas y gel antibacterial en mano.
Fuente: Excélsior