El Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), QU Dongyu, ha destacado, con motivo del Día Mundial de las Legumbres, que se celebra hoy -lunes 10 de febrero-, el papel crucial de las legumbres para hacer frente a la inseguridad alimentaria y lograr dietas sanas y equilibradas para toda la población. Además, subrayó la necesidad de aprovechar todo su potencial para acelerar el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.
Las legumbres tienen un precio de venta más elevado que otros cultivos básicos, indicó, señalando que ofrecen así a los pequeños agricultores una buena oportunidad de producir un cultivo comercial, al tiempo que contribuyen a los objetivos ambientales y de salvaguarda de la biodiversidad.
El director general de la FAO reiteró el compromiso de la Organización de seguir trabajando con todos sus asociados para mejorar la producción y el consumo de legumbres como medio de contribuir a la nutrición. “Necesitamos que el sector privado, los agricultores, Gobiernos y el mundo académico colaboren con nosotros”, añadió.
Por su parte, el sector español indicó que para promocionar las legumbres en España frente a la competencia de otros países es clave un etiquetado que indique claramente el origen de estas.
Desde el Centro de la Legumbre en España, los Consejos Reguladores de cuatro figuras de calidad controlan todo el proceso de producción de cada una de ellas. Su director técnico, Nicolás Armentero, subrayó que los bajos precios internacionales de las legumbres obstaculizan la competencia. “Quizás al consumidor no se le pone nada fácil la identificación del producto” y consideró un “gran obstáculo” que “en el etiquetado no se ponga claramente si es de importación o exportación”. Se calcula que tres cuartas partes del consumo nacional proceden de legumbres importadas, especialmente de países como Canadá, Estados Unidos o México.
Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), el consumo de legumbres se situaba en 2018 en 3,20 kilos por persona al año, el 2,4% más que un año antes, aunque su nivel ha caído bastante en las últimas décadas. “Nos gustaría que hubiera una mayor demanda por parte de los consumidores”, apuntó Armentero, que reconoció que a los productos españoles de calidad les “falta un poco de potencial para estar más presentes” en el mercado.
Según la FAO, las legumbres -las semillas comestibles de las plantas leguminosas, como lentejas, garbanzos y el guandú- contienen cantidades sustanciales de micronutrientes, fibra dietética y minerales, y son una fuente importante de proteínas vegetales.
Las legumbres son también conocidas por su capacidad de fijar el nitrógeno atmosférico, catalizando la creación de materia orgánica de calidad en los suelos y facilitando la retención de agua. Estas características ayudan a los agricultores a reducir el uso de fertilizantes y energía en los sistemas agrícolas herbáceos, lo que también reduce las emisiones de gases de efecto invernadero. (https://www.agropopular.com)