En 1916, el presidente Venustiano Carranza lanzó la convocatoria para elegir a los diputados del Congreso Constituyente que tendrían a cargo la redacción de la Constitución.
Éstos se instalaron en la ciudad de Querétaro el 10 de diciembre de ese año, en el Teatro Iturbide (hoy Teatro de la República) y sesionó hasta el 31 de enero cuando terminaron de redactarla. El 5 de febrero de 1917 fue promulgada la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Esta nueva Carta Magna sentaba bases legales importantes luego de la dictadura de Victoriano Huerta.
La Constitución establece el sistema federal, la separación de poderes, la no reelección; el sistema de elecciones directas y secretas, la división del poder legislativo en dos cámaras – Diputados y Senadores – y una comisión legislativa permanente.
Se conforma por los títulos siguientes: de las garantías individuales; de la soberanía nacional y de la forma de gobierno; de la división de poderes; de las responsabilidades de los funcionarios públicos; de los estados de la federación; del trabajo y previsión social; prevenciones generales; de las reformas de la Constitución; y de la inviolabilidad de la Constitución.
De acuerdo con información del archivo de la Secretaría de la Defensa la Carta Magna de 1917 contenía demandas sociales como normar las relaciones obrero-patronales, las conquistas agrarias, los alcances sociales y el dominio de la nación sobre sus riquezas naturales.
A lo largo de la historia, la Constitución se ha reformado. Hasta agosto de 2018 ya se contabilizaban 707 reformas, según un estudio del Instituto Belisario Domínguez, del Senado de la República.
Sin embargo una de las más importantes fue la realizada en 1953 y con la que se otorgó el derecho al voto a las mujeres.
Fuente: Animal Político