El gobierno chino reportó 139 casos de neumonía causada por una nueva cepa de coronavirus y la muerte de tres personas. El brote está esparciéndose fuera de la ciudad en la que se identificó el virus por primera vez.
Las autoridades sanitarias de Beijing confirmaron dos casos del coronavirus nuevo el lunes, 20 de enero, mientras que las autoridades de Guangdong reportaron un caso en Shenzhen. Es la primera confirmación de parte de las autoridades sobre la propagación del virus misterioso fuera de la ciudad de Wuhan, en el centro de China. Se cree que los tres pacientes que murieron estuvieron en Wuhan, según las autoridades.
La Comisión Municipal de Salud de Wuhan anunció el lunes que a lo largo del sábado 18 y el domingo 19 se detectó el virus en 136 personas más. De ellas, una murió, dos están en condición crítica y 33 en estado grave, según las autoridades.
Con los casos nuevos, la cantidad total de personas en China en las que se detectó el virus ascendió a 201, aumento considerable respecto a los 62 que se reportaron el fin de semana.
Las autoridades locales empezaron a reportar además los casos sospechosos. El lunes por la mañana, las autoridades sanitarias de Shenzhen, ciudad que colinda con Hong Kong, señalaron que están monitoreando a ocho pacientes que están en cuarentena y recibiendo tratamiento. En la provincia costera de Zhejiang, las autoridades reportaron cinco casos probables; los cinco pacientes estuvieron en Wuhan.
El brote de la enfermedad coincide con los preparativos para la fiesta de Año Nuevo Lunar, que se celebrará en el país en los próximos días. El domingo, 19 de enero, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que había pruebas de «transmisión limitada persona a persona» del virus nuevo, lo que despierta temores de que haya un brote regional. En este periodo vacacional, cientos de millones de chinos suelen viajar por todo el país y al extranjero.
A mediados de enero se detectaron tres casos fuera de China: dos en Tailandia y uno en Japón. Los tres casos se relacionan con Wuhan. El lunes, Corea del Sur confirmó también su primer caso.
Según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Corea del Sur (CCPE), se detectó a una mujer china de 35 años, proveniente de Wuhan, a través de una revisión de temperatura a su llegada al Aeropuerto Internacional de Incheon, en Seúl, el domingo. La dependencia señaló que la pusieron en cuarentena y su condición es estable.
La mujer, que reside en Wuhan, planeó unas vacaciones en Corea del Sur y Japón con cinco personas más. Dijo que el sábado tuvo fiebre y dolor muscular y un médico de Wuhan le recetó un medicamento para el resfriado, según los CCPE.
Se estima que casi siete millones de chinos viajaron al extranjero durante las fiestas del Año Nuevo Lunar del año pasado. «Creo que los turistas chinos llevarán el virus a muchos otros países de Asia en los próximos días, dado que viajan al extranjero durante las fiestas del Año Nuevo Lunar», dijo el profesor David Hui Shu-cheong, experto en enfermedades respiratorias de la Universidad China de Hong Kong en entrevista con CNN el lunes.
El brote de neumonía comenzó en diciembre en Wuhan, la ciudad más grande del centro de China y un importante centro de distribución de transportes. Las autoridades chinas relacionaron las infecciones virales con un mercado de mariscos y animales en Wuhan, mismo que quedó clausurado desde el 1º de enero para evitar que se siguiera propagando la enfermedad.
El 8 de enero, unos científicos chinos identificaron el patógeno: una nueva cepa del coronavirus, de la misma familia del que causa el letal síndrome respiratorio agudo severo (SARS, por sus siglas en inglés).
Aunque este virus nuevo no ha presentado tasas de mortalidad como las del SARS —que infectó a más de 8,000 personas y mató a 774 en una epidemia que azotó a Asia en 2002 y 2003—, un nuevo estudio del Imperial College de Londres indica que es probable que la cantidad de infecciones en Wuhan se haya subestimado considerablemente.
«La detección de tres casos fuera de China es preocupante. Calculamos, con base en datos sobre vuelos y población, que hay una probabilidad de uno a 574 de que una persona que se infectó en Wuhan haya viajado al extranjero antes de buscar atención médica. Esto implica que podría haber habido más de 1,700 casos en Wuhan hasta ahora», dijo Neil Ferguson, especialista en brotes de enfermedades del Imperial College de Londres, en entrevista con CNN.
El viernes, 17 de enero, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos anunciaron que tres aeropuertos de Estados Unidos —Nueva York, San Francisco y Los Ángeles— empezarían a hacer revisiones a los pasajeros que lleguen de Wuhan para detectar signos del virus nuevo y tomarán medidas parecidas a las que tomaron los gobiernos de Asia.
El China Daily, un medio oficialista chino, señaló el domingo, 19 de enero, que Chen Xiexin, vicealcalde de Wuhan, informó que el 14 de enero empezaron a instalar termómetros infrarrojos en aeropuertos, estaciones de tren, terminales de autobuses y puertos para pasajeros para medir la temperatura de los pasajeros que salen de la ciudad. Las medidas se impusieron cinco semanas después de que comenzara el brote y son incontables los pasajeros que han salido de la ciudad sin haberse sometido a revisión.
Fuente: https://expansion.mx/