Un grupo de surcoreanos lanzaron huevos en centros de cuarentena ubicados en las ciudades de Jincheon y Asan, al sudoeste de Corea del Sur, pues consideran son una amenaza contra su salud en paralelo con el aumento en el número de sus connacionales infectados.
El gobierno informó esta semana que al menos 700 ciudadanos surcoreanos llegarán desde Wuhan al Centro Nacional de Recursos Humanos en Jincheon y al Instituto de la Policía de Desarrollo de Recursos Humanos en Asan.
Las expresiones se mantienen a su arribo al Aeropuerto Internacional de Gimpo, al oeste de la capital, desde Wuhan, pues serán transportados a las instalaciones que los tendrán en cuarentena durante dos semanas, reporta la agencia Yonhap.
Manifestantes en Asan arrojaron huevos al Ministro del Interior y Seguridad, Chin Young, quien estaba allí para persuadirlos de que aceptaran el plan de cuarentena.
Se aglutinaron desde temprana hora en el Instituto de la Policía, donde se planeaba alojar a los que arriban, y se enfrentaron con los elementos de seguridad mientras intentaron bloquear la calle.
Nos oponemos al alojamiento de compatriotas que llegan desde China», y algunos gritaron insultos y arrojaron huevos al ministro y al gobernador, Yang Seung-jo, cuando llegaron al centro comunitario de la ciudad.
También la tensión fue alta en el centro de cuarentena de la provincia de Jincheon, donde se desplegaron 700 efectivos la víspera por la noche, y donde hoy al menos 100 residentes continúan la protesta con tractores que bloquean los accesos.
El gobierno central tomó la decisión unilateralmente sin recabar opiniones de los residentes», dijo el representante Kyeong Dae-soo del principal partido opositor Liberty Corea durante la manifestación.
El ciudadano exigió al gobierno que cancelara el plan, señalando que hay alrededor de 800 hogares dentro de un radio de 500 metros del instituto.
Estas manifestaciones podrían intensificarse aún más pues hoy mismo se confirmaron dos casos más en el país y uno confirma la primera transmisión de persona a persona en la nación, elevando el número total de personas infectadas a seis.
Fuente: Excélsior