Hay que aceptarlo, los 49ers no estarían en el Super Bowl si no fuera por la brillante actuación de su corredor Raheem Mostert quien tuvo un récord de playoffs de 220 yardas y cuatro touchdowns cuando le pasaron por encima a  los Packers para conseguir el boleto al ‘Superdomingo’.

Nadie, ni siquiera los mismos 49ers esperaban una actuación así.

Llegó a la NFL en 2015 y fue hasta 2020 cuando la gente empezó a escuchar su nombre. San Francisco es su séptimo equipo en la liga, lo cual quiere decir que 6 franquicias no confiaron su suficiente en su talento como para darle una oportunidad y después de un par de meses le daban las gracias.

En el futbol americano universitario fue igual, Mostert jugó en Purdue, donde recibió solo tiempo de juego esporádico acarreando el balón apenas 43 veces en sus primeras tres campañas (en la Final de Conferencia lo hizo 29 veces) hasta su último año, cuando corrió para 529 yardas.

Esos números no impresionaron a nadie y no fue elegido en el Draft.

En 2015 firmó como agente libre con Philadelphia Eagles y quedó fuera antes del arranque de la temporada, para ser contratado por Miami Dolphins, donde estuvo apenas un mes. Después llegó a Baltimore Ravens, donde se pasó dos meses antes de firmar con Cleveland Browns al final de esa campaña. Por último, en 2016 pasó por los Jets y Bears, sin suerte alguna.

«Eso solamente me hizo más fuerte”, dijo el RB de San Francisco. “Me volví inmune a ser dejado fuera. Yo quería mostrarle al mundo lo que puedo hacer… Y esa fue mi filosofía de ahí en adelante”. De hecho tenía tantas ganas de demostrarlo, que rechazó el dedicarse a otro deporte.

Realmente tenía talento y muchas marcas se ofrecieron a patrocinarlo para que se dedicara al deporte acuático, pero era tanto su amor por el futbol americano que estaba dispuesto a rechazar todo con tal de que pudieran ver su habilidad en los emparrillados.

Fue así como Mostert logró recorrer siete equipos diferentes durante dos temporadas; los 49ers fueron el séptimo equipo, una vez más en la escuadra de práctica cerca del final de la temporada 2016. Mostert no tuvo un solo intento hasta que llegó a San Francisco.

Logró mantenerse en el equipo, pero apenas jugó en la temporada 2017 después de lidiar con lesiones. Antes de la temporada 2019, fue enviado al tercer equipo de los corredores de los 49ers, todo indicaba que la historia volvería a repetirse.

Poco sabía que las lesiones que lo habían rezagado, serían las mismas en darle una oportunidad. Tevin Coleman y Matt Breida se lastimaron, dándole a Mostert oportunidad de prosperar. Corrió para 772 yardas en la mejor temporada de su carrera, explotando con 146 yardas en una derrota contra los Baltimore Ravens en diciembre.

Al final del tercer cuarto del juego del Campeonato, Raheem Mostert había superado esa actuación de diciembre, corriendo para 220 yardas y eso estableció un récord de playoffs de los 49ers, anteriormente ocupado por Colin Kaepernick. Aún le queda mucho camino para convertirse en uno de los mejores, pero al menos pudo demostrar que no es un corredor cualquiera y que los equipos que lo dejaron pasar, podrían arrepentirse.

Fuente: https://naciondeportes.com/

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