Las autoridades de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CFC por sus siglas en inglés) anunciaron que comenzarán a tomar las temperaturas y a preguntar sobre síntomas a los pasajeros que lleguen a los aeropuertos JFK de Nueva York, el de Los Ángeles y el de San Francisco, y que viajen desde la ciudad de Wuhan, donde se produjo el brote.
Los funcionarios estiman que unos cinco mil pasajeros serán sometidos al proceso en las próximas semanas, aunque consideraron que el riesgo para los estadounidenses se considera bajo, pero se están tomando precauciones.
En China se han detectado 41 casos de esta afección respiratoria que ha sido catalogada a nivel mundial como una “misteriosa neumonía”, entre ellos dos víctimas mortales. También se han registrado dos casos en Japón y Tailandia.
Según informó la comisión de salud de Wuhan, donde se sospecha comenzó la propagación del virus, al menos 12 personas ya recibieron alta médica tras sobreponerse frente a la enfermedad, sin embargo, cinco más continúan en estado grave.
Los coronavirus son una familia de virus que pueden causar enfermedades que van desde un resfriado común hasta el síndrome respiratorio agudo grave. Las autoridades señalan que probablemente se propagó de animales a personas, pero no han podido descartar la posibilidad de que se contagie de persona a persona.