El futbol americano ha ido evolucionando a lo largo de los años, con diferentes equipos que se crearon, se fusionaron, se mudaron o desaparecieron. Con distintas divisiones, conferencias y hasta ligas, pero, desde 1967, tiene un solo gran juego que atrae a los fanáticos del deporte en todo el mundo: el Super Bowl.
El Gran Juego (The Big One), como pudo haberse llamado, finalmente tuvo el nombre de Super Bowl por una propuesta del presidente de la AFL, Lamar Hunt, quien se basó – según cuenta la leyenda – en un juguete de sus hijos llamado Super Ball y el nombre comenzó a usarse oficialmente a partir de 1969, dejando de lado el título “Juego de Campeonato Mundial AFL-NFL”.
¿No lo sabías? Pues aquí van otros cinco datos que tal vez tampoco conozcas.
5 El origen de la frase “¡Me voy a Disney World!”
No es ninguna sorpresa ver que los ganadores del premio MVP del Super Bowl festejen gritando a la cámara que se van a Disney World (en inglés, “I’m going to Disney World»), para luego verlos en un desfile en Magic Kingdon junto al ratón Mickey.
Sin embargo, pocos saben que, originalmente, la frase surgió por una acción publicitaria no tradicional por parte de la compañía. En 1987, el entonces director ejecutivo de Disney, Michael Eisner, les ofreció a los mariscales de campo de los New York Giants (Phil Simms) y los Denver Broncos (John Elway) una jugosa oferta: US$75 mil a cambio de gritar la frase a cámara si ganaban.
Finalmente fue Simms quien lanzó el popular mensaje por primera vez a la cámara tras el triunfo de los Giants por 39-20 en el Super Bowl XXI.
4 Consumo récord de comida
Si en el resto del mundo los fanáticos se juntan a ver el juego, imagínate lo que serán los hogares estadounidenses en la cuna del deporte, donde viven más de 325 millones de personas. Por eso, ante la popular tradición de ver el Super Bowl con amigos, se consumen toneladas de alimentos y bebidas en todo el país.
Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, el domingo de campeonato es el segundo día con mayor consumo de comida en todo el año, solo por detrás del Día de Acción de Gracias.
Bonus track: Tal consumo genera la necesidad de ir al baño, por lo que se ha generado el mito de que, en el entretiempo, millones de televidentes evacuan el tanque de sus inodoros al mismo tiempo, generando un colapso en el sistema de desagüe. Sin embargo, no hay pruebas sobre ningún desperfecto en ese lapso de tiempo.
3 El fracaso del Super Bowl I
Si bien en ese entonces todavía no era oficialmente el Super Bowl, el juego que enfrentó a los Green Bay Packers de Bart Starr y los Kansas City Chiefs no cumplió con las expectativas.
Los boletos para el partido en el Coliseo de Los Ángeles costaban unos US$90 actuales (12 de ese entones) y la organización se había encargado de bloquear la transmisión televisiva en las zonas cercanas al estadio para impulsar a la gente a comprar una entrada. Sin embargo, unas 30 mil butacas quedaron vacías durante la gran final.
Por si fuera poco, la transmisión fue un fracaso, se perdió el kickoff de la segunda mitad y los oficiales tuvieron que ordenar que vuelva a patearse. Además, la grabación original se perdió y solo hay unas pocas imágenes trabadas en un conflicto legal entre varias partes.
2 Un MVP perdedor
En el Super Bowl V (1971), los Baltimore Colts festejaron el título sobre los Dallas Cowboys tras imponerse por 16-13 en un partido muy cerrado. Sin embargo, y pese a que Johnny Unitas comandó la ofensiva del equipo ganador, el MVP fue para Chuck Howley, linebacker del equipo tejano.
Por primera vez en la historia del Super Bowl, un jugador del cuadro perdedor se quedó con el premio al mejor jugador del encuentro. Hasta ahora, se mantiene como único en conseguir semejante logro sin haber ganado el anillo, luego de registrar dos intercepciones en el partido. Además, fue el primer jugador no-mariscal en obtener el reconocimiento.
Afortunadamente para Howley, un año después tuvo su revancha y, si bien no fue el MVP en el Super Bowl VI, pudo obtener el título.
1 Único equipo que no conoce el Super Bowl
Los Cleveland Browns se han convertido en un verdadero meme con el correr de los años y no es para menos. No solo por sus malas decisiones en los últimos 20 años, sino por algunos récords negativos que ostentan, incluyendo uno impactante sobre el Super Bowl: la ciudad es la única cuyo equipo nunca ha llegado al Gran Juego, ni tampoco ha podido organizar el evento.
La posibilidad de acoger la final de la NFL en la ciudad parece remota, considerando que juega en un estadio abierto y en febrero hace frío en Ohio (la liga busca climas cálidos o domos para el evento), de modo que los Browns necesitan llegar a febrero por mérito deportivo ya que, por ahora, nunca lo han hecho.
Fuente: Staff