A 4 años de que se permitió a empresas privadas instalar gasolineras en México, actualmente cerca de 34 por ciento de las estaciones de servicio tienen una marca distinta a Pemex, como son Hidrosina, Oxxo Gas, BP, G500 y Exxon Mobil, muestran datos compilados por El Financiero de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y las empresas.
Esta cantidad contrasta con lo reportado en 2018, cuando los privados representaban 24 por ciento del total de unidades económicas establecidas en el país en este sector.
Especialistas refieren que este crecimiento porcentual se debe al gran atractivo que tiene México como mercado, pues es uno de los países de mayor consumo de gasolina en Latinoamérica y donde cada vez las personas exigen un mejor servicio.
“Diferentes marcas también son diferentes servicios, en algunos lugares estamos incluso hablando de nuevos productos, eso es bueno para el consumidor y para el desarrollo”, dijo Gonzalo Monroy, director de consultoría especializada GMEC.
Alejandro Montufar, CEO de la consultora PETROIntelligence, contó también del nacimiento de nuevas marcas en el país, en las que destacan G500, Orsan, Hidrosina, entre otros, además de que otras firmas han incluso renovado sus marcas.
“Con esto se abren a la oportunidad de crecer en el mercado y de tener una nueva relación con sus clientes. Lo cual incluye también ofrecer hasta sus propios productos y servicios”, comentó.
También se reveló que de las 13 mil 282 gasolineras que hay en México, alrededor de 16 por ciento ya son de marcas extranjeras, como son Shell, BP y Repsol.
Murray Fonseca, director de downstream de Shell México, dijo a Bloomberg que tienen la intención de alcanzar una participación en el mercado nacional de 15 por ciento.
“La apertura de nuevas estaciones de servicio forma parte del plan de expansión de Shell publicado el año pasado, el cual incluye una inversión en México de mil millones de dólares durante los próximos 10 años y está enfocado en tres pilares: infraestructura, servicio, y producto”, dijo el directivo.
Cabe destacar que 17 por ciento del mercado de estaciones de servicio que no son Pemex corresponden a Oxxo y 7 Eleven, ambos con su corporativo en Nuevo León.
“Estas empresas llevan muchos años en México, algunas hasta más de 20 años, pero siempre operaban estaciones como terceros. Con la reforma energética pudieron tomar al fin esas operaciones y consolidarlas en sus resultados. Son marcas que ya generan confianza en los consumidores”, dijo Alejandra Marcos, directora de análisis y estrategia de Intercam Casa de Bolsa.
Hidrosina, Oxxo Gas, BP, G500 y Exxon Mobil son las firmas con mayor apertura de estaciones en el país, pues entre las cinco representan 61 por ciento de las gasolineras privadas en México, que no son Pemex.
La falta en desarrollo de infraestructura de almacenamiento y transporte de combustibles limita la competencia, pues Pemex se mantiene como el principal proveedor de la gasolina en México.
Alejandro Montufar, CEO de PETROIntelligence, destacó que aún falta en México mucho desarrollo para ver una verdadera competencia que pueda bajar los precios de la gasolina en México.
“Gran parte de los proyectos sigue en construcción, y son pocos los privados que están en operación. Un ejemplo es G500 en Tabasco, ahí ellos no vende gasolina de Pemex, pues su proveedor es Glencore, al tener una terminal de almacenamiento, ahí si te puedes dar cuenta que la gasolina es muy barata, porque hay infraestructura para que llegue producto, pero en el caso de la CDMX, solo llega el producto de Pemex, porque ellos tienen los ductos”, comentó.
Fuente: El Financiero