La Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CONASAMI), anunció que tanto sector público, como obrero y patronal, habían alcanzado un acuerdo para incrementar el salario mínimo en 2020 hasta un 20%.
“En 13 meses logramos consenso entre los representantes obreros y empresariales para aumentar el salario mínimo como no sucedía en cuatro décadas: 16% en 2019 y el doble en la frontera, y 20% para 2020. Es decir, habremos recuperado más del 30% del poder adquisitivo del salario”, afirmó el presidente.
Esta es una medida que esperaba mucha gente y por la que dio su respaldo en las elecciones presidenciales de 2018. Esta es la segunda vez consecutiva que el salario mínimo sube por encima de la inflación.
Pero, ¿a cuánto equivale este aumento?, ¿tendrá efectos en la inflación?, ¿mejorará la capacidad de ingresos de las personas más desfavorecidas?
El Salario Mínimo General (SMG) el próximo año pasará de 102.68 pesos a 123.22 pesos, mientras que en la zona fronteriza Norte pasará de 176.72 a 185.56, lo que significa un incremento del 20%, pero, descontando el efecto sobre la inflación, el aumento real será del 17.1%. Este será el incremento más alto en las últimas tres décadas.
En 2018, la administración de Andrés Manuel López Obrador impulsó un incremento de 16% en los salarios mínimos, mientras que los de los municipios de la frontera norte se duplicaron.
Este incremento significa cuatro veces la inflación esperada en 2020, indicó Bank of America Merrill Lynch en un análisis, en el cual ya esperaba un aumento del 20% en el salario mínimo general.
Actualmente la inflación se encuentra por debajo de 3%, su nivel más bajo desde septiembre de 2016. Sin embargo, esto se debe más por la recesión técnica por la que pasó el país en el primer semestre de 2019 y lo que se ha vivido en este año, de acuerdo con Bank of America Merrill Lynch en un análisis.
El banco de inversión apunta que un aumento al salario mínimo varias veces superior a la inflación esperada continuará ejerciendo presión sobre la inflación subyacente en 2020.
Muchas empresas mexicanas están redoblando sus esfuerzos de responsabilidad social empresarial, y de forma enteramente voluntaria, están modificando significativamente al alza, los niveles de remuneración de los colaboradores de ingresos más modestos en su plantilla.
Inclusive, unas cien compañías que operan en México se comprometieron en que, a partir del 1 de diciembre de 2019, ninguno de sus empleados ganará un sueldo menor de 6,500 pesos brutos al mes, más prestaciones, incluyendo a los colaboradores que presten servicios a través de outsourcing y al personal de intendencia y limpieza.
El incremento de salarios era algo muy esperado, sin embargo, México está llegando a un punto en el que el aumento de los salarios reales puede estar superando el crecimiento de la productividad.
Esta medida bien pueda considerarse una Caja de Pandora, los efectos y o consecuencias no serán medibles a corto plazo, y como muchas cosas para las que las 4T nos ha enseñado, sólo queda esperar.
Aletia Molina
@AletiaMolina