La economía de México seguirá a flote, pero mantendrá el ‘prolongado’ periodo de bajo crecimiento y crecientes rezagos laborales, económicos y sociales, si no se instrumenta una política industrial efectiva, alertó la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Ante ello, el organismo empresarial, que preside Francisco Cervantes, sentenció que es imprescindible impulsar una política industrial para lograr un crecimiento de 5.0 por ciento sostenido por 20 años, crear un millón de empleos formales bien remunerados al año, y reducir la pobreza en 12 millones de personas en seis años.
De acuerdo con la Concamin, la inversión productiva se desaceleró en el 2016, retrocedió en el 2017; avanzó modestamente en el 2018, pero volvió a caer en 2019.
Esto ha propiciado que año tras año la economía mexicana no haya podido generar el millón de empleos para ofrecer una ocupación remunerada a quienes por primera vez acuden al mercado laboral. “Tenemos un problema de cantidad y calidad de empleos”, señaló.
“México necesita depender más de sí mismo para modernizarse, generar riqueza, enfrentar los vaivenes de la economía mundial, mejorar su potencial de crecimiento, abatir la pobreza y elevar el bienestar en los hogares”, aseveró el organismo.
Es por ello que la Concamin sugiere forjar una sólida alianza público-privada con carácter social; articular una política industrial globalmente productiva, competitiva y con inclusión social; impulsar un crecimiento económico vigoroso, equitativo y socialmente incluyente; crear el Instituto de Desarrollo y Transferencia Tecnológica, de Innovación e Ingeniería en Manufactura (IDTIM); incrementar el contenido nacional en las exportaciones, e impulsar sectores estratégicos.
Con lo expuesto, de acuerdo con la Concamin, se elevaría la inversión pública a 5.0 por ciento del PIB en el 2024 y a 8.0 por ciento en el 2030, aunque advirtió además que es necesario que haya una producción nacional competitiva de insumos intermedios, aplicando una política económica de “piso parejo” en las condiciones en las que compiten las empresas.
Además, es importante impulsar el desarrollo regional a través de alianzas estratégicas como el Pacto Oaxaca, para el progreso del Sur-Sureste de México (Corredor Multimodal Interoceánico, puertos, aprovisionamiento de gas natural, carreteras, Tren Maya, petroquímica), entre los más importantes.
Dijo que el motor exportador se mantiene en funcionamiento, aunque se desacelera el crecimiento de las exportaciones manufactureras.
“Si la economía de Estados Unidos pierde brío, tal y como lo anticipa la Reserva Federal, habrá menos pedidos para los exportadores mexicanos y se debilitará el funcionamiento del único motor que ha impulsado el crecimiento de la economía mexicana”, sostuvo.
Es por ello que es necesario aumentar la participación del contenido nacional de las exportaciones, pasando del 30 al 40 por ciento en los siguientes seis años.
En contraste, la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, espera que en 2020 se tengan las condiciones para iniciar en el país la ruta del crecimiento económico, y que si no se retrasa la ratificación del T-MEC y se dan las inversiones que se espera que se realicen, aun podría ser mayor el crecimiento del PIB y llegar hasta 2.5 por ciento el próximo año.
“Se espera que en el primer trimestre del 2020 tengamos el T-MEC, y antes de que se ratifique por los tres países como ya está en proceso de realizarse, genera certidumbre, lo cual ayudará en lo económico, pues eso es lo que más ha afectado a México en el estancamiento del crecimiento”, reiteró.
Fuente: El Financiero