Autoridades federales arrancaron las consultas a pueblos indígenas en Yucatán, teniendo como sedes los municipios mayas de Maxcanú, Tunkás, Dzitás, Tixpéhual y Chichimilá, para informarles en qué consistirá el proyecto del Tren Maya. En estos encuentros, las y los pobladores cuestionaron principalmente sobre si esta obra realmente les generará empleos y cómo evitarán la especulación de tierras.
En Tixpéhual, el director de Infraestructura del Fondo Nacional de Fomento Turístico (Fonatur) Enrique Ramírez Escobedo sostuvo que el tren no es un negocio para el gobierno federal, es decir, no les generará utilidades, “pues la intención es que sea un beneficio poblacional”.
Por su parte, el Procurador Agrario Nacional, Luis Hernández Palacios, hizo un llamado a los ejidatarios a que tengan cuidado con la especulación de las tierras, pues, recalcó, aún no está listo el proyecto ejecutivo de la obra.
“No se dejen engañar por especuladores, no empiecen a vender en este momento, pues después sus tierras pueden tener un valor mayor al aprovechar los procesos de construcción de estaciones y polos de desarrollo”, precisó.
Al respecto, un poblador tomó el micrófono y le pidió que vigile a sus propios empleados de la Procuraduría “porque ellos conocen el proyecto del tren y son los que le dicen a los inversionistas dónde comprar tierras, para sobornar a ejidatarios, vienen a presionar para hacer chanchullos”.
Las y los habitantes que participaron en la consulta en esa localidad, también pidieron que haya beneficio constante a las poblaciones mayas y que el dinero que genere el Tren Maya no se queden en manos de extranjeros.
De igual forma, hubo quienes señalaron que los beneficios serán para comunidades cercanas a Mérida, Valladolid, Izamal y Chichén Itzá, por lo que no traería desarrollo a sus pueblos.
Fuente: El Heraldo de México