Adrián LeBarón criticó que las autoridades consideren que lo ocurrido con su familia fue una confusión de un grupo del crimen organizado y afirmó que sus seres familiares fueron utilizados para enviar un mensaje.
Dijo que hay testimonios de los menores sobrevivientes que viajaban atrás de la primera unidad baleada, quienes describen cómo la primera mujer agredida descendió del vehículo levantando las manos, y aun así fue acribillada.
«No fue un ataque hacia nosotros, pero no hay confusión, a alguien le están queriendo lanzar un mensaje y utilizaron a nuestra familia», reiteró previo a los funerales que se realizaron ayer en La Morita.
Por su parte, el activista Julián LeBarón acusó complicidad por acción y omisión a los tres órdenes de gobierno, pues señaló que las fuerzas estatales, tanto de Chihuahua como de Sonora justificaron su llegada tardía al lugar de los hechos por falta de gasolina.
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«El gobierno de Chihuahua y el de Sonora fueron cómplices de esta masacre», aseveró el activista.
«No creo que las autoridades puedan hacer justicia, las instituciones están corrompidas hasta la médula; nos dijeron que no llegaban porque no tenían gasolina, ese nivel de estupidez», agregó.
Por esta razón, se dijo dispuesto a acudir a las autoridades estadounidenses para esclarecer lo que sucedió, quiénes fueron, porqué lo hicieron y quién les ayudó.
Ante la negativa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, de aceptar el apoyo de Estados Unidos, dijo «el Presidente de México y el Congreso no son la última autoridad en este país, si ellos no están cumpliendo tenemos que recurrir a la autoridad de los ciudadanos, somos los que la tenemos».
Fuente: El Universal