Algunos manifestantes regresaban el sábado a las calles de la capital de Colombia después del toque de queda que rigió la noche anterior, luego de registrarse disturbios en medio de una protesta contra las políticas económicas y sociales del Gobierno del Presidente Iván Duque.
Cientos de personas se agrupaban en la plaza de Bolívar, frente al Congreso y a escasos metros de la sede de la Presidencia y otras más se tomaban una de las principales calles que conducen al centro de la ciudad, gritando y golpeando cacerolas, mientras la Policía comenzaba a lanzar gases lacrimógenos para dispersarlos.
Imágenes de un canal de televisión mostraban a uno de los manifestantes pidiendo calma a los agentes policiales.
«Tranquilos, sin violencia, sin violencia», decía, mientras una mujer llamaba a la «resistencia».
Más temprano, el Presidente Duque había dado un parte de tranquilidad, pero dijo que se mantendrán las medidas de seguridad para evitar actos vandálicos como los que ocurrieron el viernes en el segundo día de manifestaciones que dejaron cientos de personas detenidas.
En algunas vías en el sur de la capital de más de siete millones de habitantes transitaban caravanas de vehículos blindados del Ejército, así como soldados y policías en motocicletas.
El Alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, advirtió que si bien se ha recuperado la actividad normal en la mayor parte de la ciudad, existe el interés de mantener el desorden.
«Tenemos que prepararnos para un esfuerzo largo, yo los invito a que tengan paciencia, a que tengan resistencia porque aquí vienen días duros y difíciles», dijo el Mandatario local.
«Aquí no se trata de unos jóvenes que están llevando a cabo manifestaciones espontáneas, aquí hay un complot, aquí hay una organización de alto nivel, aquí hay unos politiqueros interesados en desestabilizar el país», agregó.
Las protestas del viernes se dieron luego de que el ex candidato presidencial izquierdista Gustavo Petro y otros líderes llamaron a otra manifestación, tras las primeras marchas del jueves, las más grandes que ha enfrentado el Gobierno de Duque desde que asumió su cargo, hace 15 meses.
La jornada de manifestaciones en Colombia se presenta en medio del agitado panorama social y político registrado en otras capitales de América Latina, como Santiago, La Paz y Quito.