Colombia va por siete días de protestas contra las políticas del presidente Iván Duque, luego de ayer no se alcanzó un acuerdo con los líderes de las protestas en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.
En la jornada de este miércoles, el Comité Nacional de Paro determinó que, en el caso de Bogotá, la marcha principal partirá a las 9:00 horas locales, desde el Parque Nacional rumbo a la Plaza de Bolívar, en el centro de la ciudad.
Otras movilizaciones partirán desde distintos puntos de la capital, entre ellas desde la Universidad Nacional, mientras que también se realizarán cacerolazos a medio día, destacó Radio Caracol.
Cuerpos policiacos ya vigilan puntos clave.
Los colombianos demandan la disolución del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) y el hundimiento de la reforma tributaria, así como un rechazo a las eventuales reformas pensional y laboral.
La reunión del martes tuvo lugar en medio de la conmoción que provocó la muerte del joven Dilan Cruz tres días después de ser herido en la cabeza por un artefacto disparado por el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía cuando protestaba de forma pacífica en el centro de Bogotá.
El joven es la cuarta víctima mortal de la violencia policial en el país desde que comenzaron el 21 de noviembre las protestas contra el gobierno, que han dejado hasta ahora unos 500 heridos, entre civiles, policías y militares, además más de 170 detenidos por participar en supuestos “actos vandálicos”.
Su hermana ofreció un mensaje en redes sociales.
Las organizaciones sociales y sindicales de Colombia, reunidas alrededor del llamado Comité Nacional del Paro, anunciaron que intensificarán este miércoles las manifestaciones contra las políticas económicas y sociales del gobierno de Duque, en honor a Dilan, quien se convirtió en un símbolo de las protestas.
Presionado por las movilizaciones y con una baja popularidad, Duque llamó el viernes pasado a una “conversación nacional” con “todos los sectores políticos y sociales” para debatir “reformas” a su política social.
Sin embargo, desde entonces reiteró su llamado a conversar sin invitar directamente a los manifestantes, que lideraron la mayor convocatoria en contra de un gobierno central en Colombia en los últimos tiempos.
Fuente: La Razón