Un funcionario del Tesoro de Estados Unidos afirmó este sábado que no hay plan alguno para evitar que las empresas chinas coticen en las bolsas de EU un día después de que se publicara que la administración de Donald Trump estaba discutiendo formas para limitar los flujos de cartera de inversionistas estadounidenses a China.
«La administración no contempla bloquear a las compañías chinas en las bolsas de valores de EU en este momento», señaló la portavoz del Tesoro, Monica Crowley, en un comunicado enviado por correo electrónico.
Crowly respondió así a la nota publicada por Bloomberg sobre una serie de medidas que estaban siendo analizadas por EU, entre las que se encontraba la exclusión de empresas chinas de las bolsas estadounidenses.
Otras posibles medidas incluían limitar la exposición de los estadounidenses al mercado chino a través de fondos de pensiones gubernamentales y colocar límites a las compañías chinas incluidas en los índices bursátiles y que sean administradas por empresas estadounidenses, según personas familiarizadas e involucradas en las discusiones.
La declaración de Crowley no abordó ni descartó ninguna de esas posibilidades.
Funcionarios de la administración han estado examinando las opciones durante semanas, y el Tesoro de EU ha estado participando en reuniones interinstitucionales presididas por Larry Kudlow, asesor económico de Trump, dijeron las fuentes consultadas por Bloomberg.
Aún así, la propuesta viene de los ayudantes más agresivos de Trump, como el asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro.
El Consejo Económico Nacional y el Tesoro desconfían de la forma en la que el mercado se tomaría esta medida, por lo que trabajan para garantizar que si este plan es ejecutado, lo sea en una forma que no asuste a los inversores, agregaron las personas.
Elementos cercanos a la administración federal expresaron su molestia el viernes por el hecho de que esta noticia se filtrara, alegando que la Casa Blanca aún no había decidido un curso de acción.
Subrayaron que en las pláticas se estaban analizando una amplia gama de opciones, por lo que debían de haber sido puestas bajo el escrutinio público.
Algunos promotores de una ofensiva contra flujos financieros chinos dentro de la administración dijeron que vieron el hecho de que las discusiones se filtraron como un esfuerzo de parte de ‘moderados’ dentro de la Casa Blanca.
El presidente Donald Trump ha dado luz verde para la revisión, dijo una persona familiarizada con las deliberaciones, pero no se han elaborado mecanismos exactos.
Los consejeros más ‘agresivos’ del Gobierno de EU argumentan que cualquier inversión de EU en empresas chinas, sin importar dónde coticen, expone a los inversores a posibles fraudes como resultado de los malos estándares corporativos en China.
Algunos de ellos afirman incluso que la estrecha relación entre el gobernante Partido Comunista Chino y muchas compañías que cotizan en bolsa, ya sea de manera formal o informal, significa que cualquier inversión en ellas equivale a apoyar al partido e incluso al Ejército Popular de Liberación.
Consejeros como Navarro han acusado en el pasado a Wall Street de tratar de socavar los esfuerzos de Trump para controlar la economía de China.
Además, un grupo bipartidista de legisladores, en particular el senador Marco Rubio, ha presionado por mayores restricciones de inversión y un escrutinio más estricto de las empresas chinas en los índices bursátiles y los fondos de pensiones estadounidenses.
Fuente: El Financiero