La voz de los estados
En México, como en el resto del mundo, el factor sorpresa siempre será el mejor aliado del mal; en cualquiera de sus formas, la delincuencia organizada, el terrorismo o los atacantes solitarios.
No hay forma que el Estado garantice la seguridad a sus ciudadanos. No la hay porque ante este factor sorpresa, nada se puede hacer.
Me refiero a los hechos del día de ayer en Guanajuato. En esa entidad, cinco custodios fueron abatidos por sicarios cuando viajaban en el transporte del propio reclusorio para el que trabajaban.
Esto trajo a la memoria un hecho similar, ocurrido en el mes de noviembre de este año, en Morelos. Un comando armado acabo con la vida de 6 personas al transportarse también en un autobús del centro penitenciario.
Como le digo, ante el factor sorpresa, hay muy poco que hacer, solamente la labor de inteligencia, misma que hay que reforzar si algo se quiere prevenir.