Los industriales del país presentarán una contrapropuesta a legisladores y al Ejecutivo sobre el tema de la actualización al Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) al consumo de bebidas azucaradas y comida de alto contenido calórico, dijo Francisco Cervantes, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin).
Adelantó que será presentada el próximo 1 de octubre y va orientada a incentivar la educación sobre la combinación de alimentos y a estimular la generación de áreas para ejercitarse y así frenar los niveles de obesidad.
“Vamos hacer una contrapropuesta muy seria para presentarla tanto en el Congreso Legislativo como en el Ejecutivo. Una contrapropuesta que puede ser interesante para combatir la obesidad, pero también, esos 60 mil millones de pesos que aporta la industria de IEPS, que se inviertan en salud, en espacios para ejercitarse, en programas de educación para saber combinar alimentos”, dijo el líder industrial entrevistado en el marco del Foro Nacional de Normalización 2019.
Descartó que la propuesta de cambiar el etiquetado de los productos alimenticios vaya a tener un impacto en los hábitos de consumo de la población, con aras de reducir el aumento de los niveles de obesidad en el país.
“No han resultado, En Chile se hizo el etiquetado y hubo 2.5 por ciento más de obesidad. En Europa no existe el etiquetado y no hay los niveles de obesidad, es más bien un tema de educación en alimentación y que haya espacios para hacer ejercicio”, apuntó.
Datos de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados estima que la propuesta de actualización del IEPS a tabacos, bebidas alcohólicas y endulzadas y alimentos de alto contenido calórico generaría 62 mil 110 millones de pesos adicionales en ingresos fiscales para la Hacienda Pública.
En el Proyecto del Paquete Económico 2020 se propone actualizar el IEPS a bebidas saborizadas con azúcares con una cuota de 1.2705 pesos por litro, mayor a la actual de 1.17 pesos, a fin de generar recursos que se destinen al sector salud.
Para el sector agroalimentario, que incluye desde las bebidas azucaradas, la panificación, dulces y chocolates, el impacto económico del aumento del IEPS sería bastante complicado.
“Estamos en un momento de desaceleración mundial en donde tenemos que impulsar a las empresas. Es cierto que lo que esté mal tenemos que arreglarlo y en eso estamos totalmente claros, tenemos toda la voluntad de ayudar pero no obsesivamente. Todo se puede arreglar con mesas de diálogo”, enfatizó. (LETICIA HERNÁNDEZ. EL FINANCIERO)