El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) dio a conocer en las últimas horas que capacita a funcionarios y representantes de gremios productivos como una medida preventiva para evitar la reaparición de la peste porcina africana en América Latina.
El objetivo de la actividad es informar sobre factores clave para evitar una potencial diseminación, entre ellos controles reforzados en fronteras, manejo de desperdicios alimentarios de aviones y barcos, atención redoblada a los signos clínicos de porcinos en las granjas e incremento de las medidas de bioseguridad.
«La situación de riesgo actual es diferente a la de los últimos 40 años. La colaboración público-privada, el control en fronteras, el fortalecimiento del diagnóstico, la bioseguridad, la comunicación y el trabajo coordinado de organismos internacionales son vitales para poder avanzar en su prevención», dijo el especialista en Sanidad Agropecuaria e Inocuidad de los Alimentos del IICA, Jaime Romero.
El IICA, con sede en Costa Rica, indicó en un comunicado que en la capacitación participaron expertos del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal de Estados Unidos, de la Unión Europea, la Secretaría General de la Comunidad Andina, así como funcionarios y representantes de gremios productivos de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú.
La peste porcina africana es una enfermedad altamente infecciosa para los animales e inofensiva para los seres humanos. No existe una vacuna efectiva y en América no está presente desde hace 40 años.
Desde el año pasado se han registrado brotes de la enfermedad en China, Vietnam, Mongolia y Camboya, según la información del IICA.
«Es clave actualizar la normativa vigente en el manejo de la peste porcina africana y el análisis de riesgo, así como tener acciones regionales conjuntas, para lo que la cooperación técnica del IICA es fundamental», expresó el especialista de la Secretaría General de la Comunidad Andina, McAllister Tafur.
Por su parte, el asesor de la Dirección de Inocuidad de los Alimentos y Salud de la Unión Europea, Francisco Reviriego, compartió la experiencia europea en el manejo de la peste porcina africana, con énfasis en la estrategia de zonificación.
«Esta estrategia permite con toda seguridad la circulación de animales y productos desde zonas libres al interior de la Unión Europea. Desde que reapareció la enfermedad en el 2007 es necesario fortalecer la bioseguridad, el entendimiento de la situación en animales silvestres, la identificación animal y la trazabilidad, el diagnóstico, la normativa y el trabajo colaborativo», afirmó Reviriego.
La peste porcina fue detectada en Cuba en 1971 y 1980, en Brasil y República Dominicana en 1978 y en Haití en 1979. Sus efectos fueron devastadores y generaron grandes pérdidas. El IICA tuvo un papel protagónico en la erradicación de esta enfermedad en ese período. (EFE)