Es el primer torneo oficial de Gerardo Martino al frente de la Selección Nacional Mexicana y la de hoy será su primera final, nada menos que ante Estados Unidos…
Y cuando todo mundo esperaba que aplicara una de esas declaraciones con las que pudiera prender todavía más la expectación por este partido, el argentino le puso paños fríos. “Si pierde México, tampoco pasa nada”…
La frase cimbró el lugar por un momento, aunque después, al darse cuenta de lo que ocasionó, claro, el Tata matizó la situación: “Siempre hay que estar preparados para ganar y perder, porque para eso estamos, pero con cinco o seis meses que llevamos hay otro objetivo secundario, el de un proceso de cuatro años”. Y cuando parecía que minimizaba a la Copa Oro, volvió a aclarar que el “respeto a esta competencia no cambia, seguimos asumiendo lo que nos toca, ya es un mérito haber llegado a la final, todos aspiramos a conseguirla, pero hay otra selección que también partía como favorita. Los dos equipos tenemos el derecho de sentirnos con la sensación de que tenemos que ganarla”.
Gerardo Martino añadió que si México llegó a la final del torneo auspiciado por la Concacaf no ha sido por casualidad “sino por méritos propios, hemos sido justos ganadores en cada uno de los juegos que hemos disputado. Lo que hemos hecho es ser los dueños de cada partido, que creo que era lo que se esperaba de nosotros, aunque con la falta de contundencia el análisis va por otro lado”.
Para poder ganar esta noche en el Soldier Field necesitará que reaperezca la mejor versión de su equipo que, aseguró, se mantendrá apegado al plan de juego que quiere dominar, y aunque lo haga menos, el Tata sabe que debe salir con la Copa en mano.
Fuente: El Universal