Cómo olvidar cuándo el ahora presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, encabezó un plantón en la capital del país que se instaló en Paseo de la Reforma en protesta por el resultado de las polémicas elecciones que le dieron el triunfo a Felipe Calderón Hinojosa. El bloqueo, que inició el 30 de julio del 2006, se dio tras una votación a mano alzada en la plancha del Zócalo.
Hace tantos ayeres de eso, que a los morenistas ya se les olvidó la historia y ahora, diputados de Morena aprobaron en el Congreso de Tabasco una iniciativa enviada por el Ejecutivo estatal que contempla penas de 10 a 20 años de prisión a quienes realicen manifestaciones con marchas y bloqueos o impidan la ejecución de obras públicas o privadas, a cuya medida calificó la oposición como “Ley del Garrote”.
Fue la Comisión de Seguridad Pública, Procuración de Justicia y Protección Civil del Congreso del estado, con tres votos a favor y uno en contra, la que avaló modificar los artículos 299; 306; 307 y 308, adicionando el artículo 196 Bis; y del artículo 308 Bis, del Código Penal de Tabasco.
La legisladora Ingrid Rosas Pantoja, del PRI, se opuso a la iniciativa por considerar lo elevado de las penas, y acusó que se pretende utilizar como pretexto “para inhibir el derecho de los ciudadanos de ejercer cualquier tipo de manifestación en contra del gobierno federal, estatal, municipal o de cualquier otro ente público, aunque sean pacíficas”.
Según los diputados de Morena que aprobaron la iniciativa “lo que estamos tratando aquí es meter un orden, en donde las cosas que son justas se hagan”.
La Ley se aplicaría quienes obstruyan vías de comunicación, porque muchas veces se van a realizar obra pública, y entonces tratan de tapar vías de comunicación, pues prácticamente perjudicando a terceras personas que no tienen nada que ver.
¿De qué Estado hablamos? Si, Tabasco… Donde mucha gente no quiere que se construya Dos Bocas, por cierto.
El 17 de junio el presidente Andrés Manuel López Obrador garantizó el respeto a las anunciadas manifestaciones de organizaciones campesinas, pero les recomendó tomar en cuenta que, si no defienden causas justas, generarán el rechazo de la población. ¿De cuando acá le preocupa eso al Presidente?
Sin embargo, este gobierno, no deja de exhibir su novatez y sus gustos por los excesos, opacidad en el manejo de información, falta de transparencia en sus procesos, y de seguir así, los colmillos que presume el Presidente de muy poco van a servirle.
Aletia Molina
@AletiaMolina1