El problema del sargazo en el Caribe mexicano ya afecta a los pastos marinos provocando su debilitamiento a causa de los lixiviados que desprende la macro alga, lo que ocasiona la perdida en la estructura de los arenales en las playas y que las deja desprotegidas ante la presencia de huracanes.
De acuerdo con Brigitta I. van Tussenbroek, investigadora de la Unidad de Sistemas Arrecifales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), los pastos son vitales en la formación de una estructura en la arena que disminuye la fuerza del mar y evita que las playas se degraden.
Agregó que este tipo de flora también sirven de alimento para numerosas especies de fauna marina y productores de carbono.
La científica subrayó que si la franja de pasto, que fija la arena, se pierde por la marea marrón que produce el sargazo, cuando una tormenta se aproxima, el viento se lleva la arena.
En tanto, resaltó que los huracanes son necesarios para “limpiar los sistemas” de todos los nutrientes y materia orgánica con los que se encuentra cargado el mar Caribe.
Advirtió además que la afectación por sargazo es doble, ya que además de provocar la degradación de pastos marinos, existe un mal manejo del alga que se recoge de las playas con todo y arena.
De acuerdo con la especialista, el costo para lograr la recuperación de estas playas erosionadas, tan sólo en la zona norte del estado, se calcula en alrededor de tres mil millones de pesos.
1 comentario
El Sr.Presidente dice que es un» problema menor» pero si el dijera que el sargazo «es sabroso y nutrtivo» sus feligreses acabarían con él.