A mediados de 1990, Estados Unidos, México y Canadá acuerdan establecer un tratado de libre comercio, las negociaciones inician en 1991 y el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica entra en vigor el 01 de enero de 1994.
En el sector agroalimentario se pensaba que el competir con la principal economía del mundo, desplazaría a los productores mexicanos y a la producción nacional, lo cual nos haría más dependientes en alimentos del exterior.
Hoy a 25 años de entrada en vigor de este tratado, la realidad ha sido otra y no ha sido un camino fácil, en 1994 el sector agroalimentario mexicano exportaba a Estados Unidos poco más de 2,800 millones de dólares, hoy exportamos casi 27 mil millones.
A partir del 2016, México se convirtió en el principal proveedor de alimentos para Estados Unidos representando el 20 % de sus importaciones, siguiendo Canadá y la Unión Europea como sus principales proveedores.
Actualmente, el 78% de las exportaciones agroalimentarias mexicanas, tienen como destino el mercado de los Estados Unidos.
Para Estados Unidos, el tratado de libre comercio incrementó de manera muy importante sus exportaciones agroalimentarias a nuestro País, pasando de 4,200 millones de dólares en 1994 a casi 20 mil millones al cierre del 2018, representamos el segundo destino de las exportaciones de alimentos de Estados Unidos, después de Canadá.
Nuestro País exporta a los Estados Unidos, principalmente cerveza, tomate, aguacate, carne de res, berries, chiles, tequila y azúcar, e importamos de los Estados Unidos, primordialmente maíz, soya, lácteos, carne de puerco, de res , trigo, carne de pollo, algodón, fructosa, muchos de estos productos somos su principal destino, la realidad es que somos mercados complementarios, exportamos en alimentos lo que Estados Unidos necesita y nosotros importamos de ellos productos en donde somos deficitarios.
La Balanza comercial agroalimentaria entre MX y USA durante 20 años de la entrada en vigor del TLCAN fue deficitaria para nuestro País, y no fue sino a partir del 2015 que México mostró un superávit que hoy representa poco más de 7 mil millones de dólares.
Uno de los mayores beneficios que a México y a los productores agropecuarios ha derivado de la apertura comercial, principalmente del TLCAN, es que nos ha hecho ser más competitivos.
Hoy México se posiciona como el 10º exportador de alimentos a nivel mundial, la calidad de nuestros productos cuenta con un reconocimiento nacional e internacional que lo avalan las diferentes certificaciones de calidad e inocuidad que existen, exportamos a más de 160 paises.
El nuevo tratado de libre comercio, el T-MEC, una vez ratificado por los Congresos de Estados Unidos y México y por el Parlamento de Canadá vendrá a fortalecer lo que hoy es día se ha convertido como la región más dinámica del mundo, los beneficios tendrán que verse reflejados en los tres paises que integran este importante tratado.
México y Estados Unidos en el sector agroalimentario seguirán siendo mercados complementarios, ambos nos necesitamos; existen intereses de ambos lados de la frontera, es fundamental que trabajemos como buenos vecinos, como aliados y no con amenazas que deterioran la relación y enturbian el ambiente. (LUIS FERNANDO HARO. EL SOL DE MÉXICO)