De cara a la posible imposición de aranceles a los productos mexicanos en los Estados Unidos, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, se pronunció por no romper el diálogo con el gobierno de Donald Trump.
El jefe del Ejecutivo federal sostuvo que en las actuales circunstancias, México debe actuar alejado de reacciones impulsivas y siempre cuidar la buena vecindad con el pueblo y el gobierno de Estados Unidos.
«En este caso, nosotros queremos mantener la unidad con el pueblo, con el gobierno de Estados Unidos y mantener muy buenas relaciones con el presidente Donald Trump, esa es nuestra postura (…) no optar por una postura radical o maniquea de uno u otro, sino ejercer nuestros derechos soberanos a tener relaciones comerciales, financieras con todos los países del mundo y al mismo tiempo, cuidar la relación con Estados Unidos».
Al abordar el tema durante su conferencia matutina desde Palacio Nacional, se le preguntó al presidente si es momento de que México diversifique sus relaciones comerciales con otros países, sobre todo cuando, de concretarse la medida contra nuestro país, el dinero de aranceles pudiera usarse para construir el muro en la frontera prometido por Donald Trump durante la pasada campaña electoral y quien en unos cuantos días formalizará su deseo de reelegirse para un segundo período.
«Entonces, por eso o creo que tenemos nosotros que hacer un esfuerzo de conciliación, de diálogo, de no ruptura. No ruptura con el gobierno de Estados Unidos. ¿Cuáles son los límites? Lo que tiene que ver con nuestra soberanía, la dignidad de nuestro pueblo, pero no actuar de manera impulsiva, nada de balandronadas, si vamos a tomar una decisión decirlo quedito sin alzar la voz, con todo respeto, pero con firmeza», sostuvo el presidente.
De acuerdo con el presidente López Obrador, en caso de que México opte por intensificar su comercio en Asia, Europa o el propio continente americano «lo mejor es no descuidar» la buena vecindad con el gobierno de los Estados Unidos, pues la relación cultural y comercial ese país y el nuestro en muy estrecha.
Fuente: Excélsior