El cuerpo del estudiante Leonardo Avendaño, quien fue asesinado en Tlalpan,arribó a la funeraria Purísima Avante para ser despedido por sus familiares.
El último adiós lo hicieron a puerta cerrada, mientras uno a uno de sus deudos rodeó el féretro.
“¿Por qué?”, se alcanzó a escuchar. Luego hubo aplausos para que personal de la funeraria retirara el féretro por la parte trasera, rumbo a la cremación.
¿Qué pasó con Leonardo?
La procuraduría local dio a conocer que finalmente la Fiscalía Central de Homicidios tomó el asesinato de Hugo Leonardo Avendaño Chávez, estudiante de posgrado de la Universidad Intercontinental (UIC), cuyo cuerpo fue encontrado el pasado miércoles en un paraje de la colonia Héroes de 1910, en Tlalpan.
Ayer, la procuradora local, Ernestina Godoy, aseguró que el joven de 29 años no fue secuestrado porque los familiares no recibieron una llamada por el rescate; no obstante, el caso se radicó, en primera instancia, en la Fiscalía Antisecuestros.
De acuerdo con los primeros avances de la investigación, la víctima fue encontrada en el asiento trasero de una camioneta Chevrolet Trax gris con placas de circulación E35-ATG de la Ciudad de México, tapado con un cobertor de color, sin rastro de lesiones por arma de fuego; sin embargo, tenía varios golpes. La necropsia determinó muerte por asfixia por estrangulamiento.
El crimen consternó a la familia, que dijo que Leonardo fue privado de su libertad el pasado martes 11 de junio.
«No tenía problemas con nadie»
Ese día perdieron contacto con él, y el miércoles su cuerpo se encontró dentro de su propio vehículo. Las primeras indagatorias de la PGJ indican que posiblemente el crimen tenga otros tintes, por lo que analizan cámaras de seguridad así como el teléfono celular de Leonardo.
“No tenía problemas con nadie”. Al respecto, Josué Vicente Avendaño Chávez, hermano de Leonardo, comentó que jamás recibió una llamada por parte de secuestradores y tampoco pidieron un monto como rescate.
En entrevista, refirió que hace dos semanas Leonardo finalizó una maestría en la Universidad Intercontinental en Psicoanálisis; se desempeñaba como seminarista en la parroquia Cristo Salvador, ubicada en la alcaldía Miguel Hidalgo, y que viven en Iztapalapa.
Fuente: El Universal