Las autoridades aduaneras de Estados Unidos interceptaron en una de las terminales del puerto de Filadelfia un cargamento masivo de cocaína, que de acuerdo con las primeras estimaciones rondaría las 16,5 toneladas. La droga confiscada este martes, si hubiera llegado a ser distribuida en la calle, habría tenido un valor de mercado superior a los mil millones de dólares. Es la mayor incautación de la historia en la región y uno de los mayores alijos de esta droga en Estados Unidos.
La cocaína se encontraba repartida en varios contenedores, de acuerdo con la información que adelantan medios locales que citan fuentes que participan en el operativo. El cargamento fue transportado por el MSC Gayane, que viajó desde Chile a Panamá y las Bahamas antes de tocar puerto en EEUU. La agencia antidroga (DEA) confirmó después el arresto de varios miembros de la tripulación.
La investigación está en marcha, pero se especula con que la droga podría haber sigo cargada en Bahamas. Las primeras informaciones indican que el destino final del carguero era Europa aunque no está claro si era también el caso para la droga. La interceptación tuvo lugar en la terminal situada en el río Delaware, al sur de la ciudad de Filadelfia. El fiscal William McSwain declaró que el narcótico es suficiente “para matar a millones” de personas.
El alijo deja pequeño los casi 1.500 kilogramos de cocaína que fueron incautados hace solo tres meses en el puerto de Nueva York y Nueva Jersey, que se consideró como la más importante en los últimos 25 años en la ciudad de los rascacielos. La droga en ese caso fue enviada directamente desde Buenaventura, en Colombia, y se valoró en unos 80 millones de dólares. El barco iba hacia Amberes, Bélgica.
La agencia antidroga de EE UU ya advirtió tras estas incautaciones récord que la cocaína está de vuelta como en los años de la década de los noventa. Los traficantes, explica la agencia, están tratando de abrir nuevos mercados mezclando la droga con sustancias sintéticas como el fentanilo, que es 50 veces más potente que la heroína. Por este motivo insisten en la importancia de la coordinación entre las distintas agencias.
McSwain asegura que se trata de uno de los alijos «más importante de las historia de EE UU». Hace justo tres décadas, en pleno boom de la coca, se confiscaron 21 toneladas en Los Ángeles. Ahora las autoridades atribuyen esta escalada en los cargamentos también a la abundancia de cocaína en Colombia tras suspenderse la erradicación del cultivo.
La terminal donde se encuentra el MSC Gayanetiene capacidad para 14.000 contenedores de carga. En este mismo puerto se incautó este año un alijo de cocaína valorado en 38 millones de dólares, que se consideró el más importante en dos décadas. Las autoridades insisten en que estas interceptaciones no solo permiten salvar vidas, “también contribuye a poner fin a la violencia asociada con el narcotráfico”.
Fuente: El País