Entre 2009 y 2016, la prensa reporto un total de 618 fosas clandestinas, de las cuales fueron exhumados mil 829 cuerpos y 45 mil 381 restosde personas en 23 entidades del país, cifra que podría aumentar a 817 fosas con 2 mil 229 cuerpos y 93 mil 296 restos, así lo da a conocer el informe “Violencia y Terror: Hallazgos sobre Fosas Clandestinas en México 2006-2016, que es una versión actualizada revisada y actualizada de un informe anterior publicado dos años atrás.
En ese mismo periodo, las procuradurías y fiscalías estatales reportaron mil 606 fosas, de las cuales fueron exhumados 2 mil 489 cuerpos y 584 restos de 24 entidades del país.
En la investigación se precisó que entre los años 2000 y 2015, la ahora Fiscalía General de la República (FGR) afirma haber identificado tan sólo el 6% de los cuerpos exhumados. También, detallaron que la FGR les informó haber abierto 81 investigaciones o averiguaciones previas y consignado a 106 personas.
Durante la presentación del informe en el que participaron el Programa de Derechos Humanosde la Universidad Iberoamericana Ciudad de México (IBERO), la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, se advirtió que el número de fosas halladas se sigue acumulando, de manera que la práctica de inhumación clandestina ha persistido; las fosas clandestinas observadas sólo son parte de un universo más grande que no se ha documentado en su totalidad; y existen inconsistencias y falta de certeza en las cifras oficiales.
David Fernández Dávalos, Rector de la Ibero, consideró que más allá de las cifras el tema de las fosas clandestinas es un tema de seres humanos a quienes se les ha negado la identidad, no solo a las personas inhumadas con impunidad y en algunos casos con anuencia o participación de las autoridades. También hizo algunos planteamientos sobre las necesidades para la búsqueda de personas desaparecidas.
“Se deben implementar medidas necesarias para atender la emergencia forense que enfrentamos ello incluye por una parte lograr la identificación de las personas que se encuentran en las fosas y en servicios médicos forenses y garantizar una digna devolución de los cuerpos a sus familiares y construir y nivelar capacidades institucionales en los servicios periciales y forenses de todo el país”, destacó.
En su oportunidad, Jan Jarab representante en México de la ONU explico que este informe representa solo una parte los casos del universo real de las fosas clandestinas, y estamos sin conocer la situación real de los hechos. También pronosticó que habrá más reportes de fosas clandestinas en futuro inmediato por la apertura del gobierno actual a las investigaciones.
En ese sentido, hizo seis recomendaciones: es necesario un cambio de estrategia de seguridad; adoptar el registro nacional de fosas, tanto las clandestinas como las fosas comunes que existen en los cementerios panteones que existen en los municipios del país; emitir el programa nacional de exhumaciones, de acuerdo a los estándares internacionales; atender la emergencia forense mediante la adopción de un mecanismo de asistencia extraordinario y mediante la instrumentación de un proceso de reforma profunda de los servicios forenses en México.
Otra de estas recomendaciones es avanzar en la generación de sistemas registro de archivos, transparencia, acceso a la información, es urgente abundó contar con información fiable, homologada, accesible que permita generar política pública enfocada al cambio y a la materialización de resultados y la ultima recomendación es fortalecer las capacidades de investigación.
“El gobierno anterior, cuando yo llegue a México hace tres años, mantuvo una narrativa que no hay desaparecidos, solo personas no localizadas, una tendencia de ocultar, entonces si pasar a los mas altos niveles de transparencia es fundamental para avanzar en este tema (…) Es necesario saber el número y localización de las fosa, el número e identidad de las personas, también la identificación y sanción de los responsables”, expresó.
Este mapa del horror, resaltó, solamente podrá remontarse mediante estrategias efectivas de combate a la impunidad y aplicación de medidas punitivas contra quienes desaparecieron a miles de personas de manera ilícita.
Fuente: El Heraldo de México