El constante debilitamiento de la economía mexicana y las nuevas amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, han generado un ambiente de incertidumbre y de expectativas poco positivas para México.
“Esos factores pueden inhibir aún la posibilidad de elevar el ritmo de avance de la economía, alejando cada vez más el objetivo de lograr tasas de crecimiento de 4%”, apuntó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Señaló que tanto los factores internos como externos reflejan la reducción de los pronósticos de crecimiento, como los planteó la nueva administración federal.
El debilitamiento de la actividad económica de México se acentuó al reportar una caída de 0.2% que, aunque en términos anuales se mantuvo en terreno positivo al reportar un avance de 0.1%, este fue su menor avance desde el último trimestre de 2009 y también el más bajo para el primer trimestre de cada uno de los últimos cuatro sexenios.
Los problemas internos también han crecido como resultado de la inseguridad pública, la incertidumbre política interna, la corrupción, la impunidad y la falta de Estado de derecho, remarcó el organismo del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Pero la inquietud ha crecido debido a las decisiones de política del actual gobierno, pues no generan incentivos adecuados para inversión, como ocurrió con el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) y la refinería de Dos Bocas, refirió.
Este último proyecto de infraestructura energética dará comienzo este domingo, empero, aún sigue sin darse a conocer el estudio de impacto ambiental y, más importante aún, sin el análisis de beneficio-costo al que obliga la Ley de Responsabilidad Hacendaria y Presupuesto.
Respecto al entorno internacional, el CEESP indicó que el intercambio comercial con Estados Unidos enfrentará un “periodo complejo” ante un súbito cambio de las señales provenientes de ese país, en vísperas del proceso para ratificar el nuevo acuerdo comercial de Norteamérica.
El presidente Trump anunció su decisión de aplicar un arancel de 5% a todos los productos mexicanos a partir del próximo 10 de junio y podría elevarse hasta 25%, como una medida de presión para resolver el problema de migración ilegal hacia el otro lado de la frontera.
Tras la amenaza anunciada el pasado jueves por la noche, el mercado cambiario reaccionó ante esa nueva fuente de incertidumbre con depreciación significativa del peso frente al dólar, de ahí la inminente necesidad de reforzar los aspectos que faciliten la inversión privada y, con ello, reactivar la pública, remarcó el organismo en su análisis semanal.
En ello se debe incluir la vigencia del Estado de derecho, la claridad y transparencia de los procesos judiciales, la competencia de los mercados y la mayor inclusión en los mismos.
También se deben evaluar los proyectos de inversión pública, la protección de la competitividad y la reducción de los costos de la economía que se han elevado por fallas en la seguridad pública, el transporte, la regulación y trámites excesivos, y la extorsión en diversas actividades, añadió.
Fuente: El Economista