Los sismos de septiembre de 2017 tienen una relación con la actual actividad del volcán Popocatépetl, pero se siguen investigado los alcances de esta hipótesis, informó Servando de la Cruz, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM.
”No hay duda de que los sismos de 2017, ambos (septiembre 7 y 19), de alguna manera influyeron en el sistema magmático del volcán Popocatépetl, sino regionalmente en muchos otros aspectos.
”Esos dos sismos liberaron una enorme cantidad de energía, extraordinaria, especialmente el de Chiapas, el primero de los sismos, y luego el otro, que tuvo una característica diferente a sismos que hemos observado anteriormente”, explicó el investigador, integrante del Comité Científico Asesor del Volcán Popocatépetl.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Sismológico Nacional (ISN) realizaron este martes la conferencia “Actividad reciente del volcán Popocatépetl”, para informar sobre las condiciones de la montaña y medidas de manejo de las cenizas expulsadas.
De la Cruz destacó que el sismo del 19 de septiembre de hace dos años tuvo características que pudieron afectar más en el comportamiento del volcán, pero las investigaciones se están realizando.
”Ocurre a una profundidad considerable en el estado de Morelos, en una zona en la cual no es muy frecuente ese tipo de actividad sísmica tan intensa.
”Esa liberación de energía, también la podemos pensar como una modificación del estado de esfuerzos; los sismos son causados por esfuerzos, la roca se somete a un esfuerzo y eventualmente se llega a su límite de resistencia y la roca se rompe”, explicó el investigador.
Destacó que desde esa fecha se han detectado modificaciones en la actividad sísmica del volcán, así como de las explosiones registradas.
”El cambio de esfuerzo regional es posible que hay modificado la relación entre las cámaras magmáticas, es posible que haya modificado las trayectorias de los fracturamientos que determinan las trayectorias de emisión de gas y los materiales magmáticos y otro tipo de factores.
”Que los haya modificado no quiere decir que necesariamente los haya empeorado, simplemente se modificaron los patrones, y eso es lo que estamos estudiando todavía”, explicó De la Cruz.
En la conferencia se recomendó que la población se mantenga al tanto de los avisos de las autoridades, debido a que no es posible establecer un escenario sobre el comportamiento de la actividad del volcán.
Fuente: Excélsior