Con una misa de cuerpo presente y una ovación por parte de amigos y familiares, el músico y escritor Armando Vega Gil fue sepultado en el cementerio Los Cipreses, como dispuso su madre Evelia Rueda.
A las 14:00 horas con 10 minutos de este martes, el cuerpo del artista llegó a la zona más alta y boscosa del municipio de Naucalpan, en el Estado de México, para ser sepultado.
El sacerdote lo recibió con la bendición y de esa forma el cuerpo de Armando Gil ingresó al cementerio, cobijado por la religión que profesa su madre.
Para despedir al músico, quien se suicidó tras una acusación anónima en su contra por supuesto acoso sexual, llegó únicamente un grupo de amigos cercanos, entre ellos los integrantes de la mítica banda de rock Botellita de Jerez, en la que Vega Gil fue bajista fundador, así como letrista de algunos de los temas que popularizó el grupo.
Vega Gil fue objeto de un homenaje por parte de no más de 25 personas que recorrieron parte del camino de su vida, de su trayectoria artística y su legado como ser humano.
El sacerdote ofició una misa en la que destacó las virtudes y valores que tuvo en vida el músico. “Despedimos hoy a este hombre que supo ser buen hijo, buen hermano, y buen padre; asimismo, buen amigo, buen compañero de trabajo y ejemplo profesional para miles de seguidores que como músico supo cosechar y cultivar”.
A pesar de que algunos familiares comentaron esta tarde que en alguna ocasión él dejó ver su deseo de ser cremado. La señora Evelia siempre quiso, porque así lo dicta su religión, que todos los miembros de su familia recibieran cristiana sepultura.
Personal de Los Cipreses comentó a Notimex que, de cualquier forma, y por las circunstancias en que perdió la vida, legalmente debía ser sepultado y no cremado.
Horas antes en la agencia funeraria de la colonia Roma, donde se velaron los restos de Vega Gil, Rubén Albarrán, integrante de Café Tacvba, se disculpó por no asistir al cementerio, y dijo: “Lo viviremos a través de su obra”.
Fuente: Excélsior