Mario Ávila
La voz de los estados
La mañana de este martes los acapulqueños se estremecieron ante un operativo de proporciones mayores; la marina y la policía estatal tomaron el control de la seguridad en el puerto.
Tras el clima de violencia, las amenazas a la presidenta municipal electa Adela Román y la presunta infiltración del crimen organizado en la policía de la ciudad, el gobierno del Estado apoyado por la Secretaría de Marina, reunieron a los cuerpos policiacos de Acapulco, los desarmaron y someterán a exámenes de confianza a sus mandos.
De forma simultánea, la Fiscalía General del Estado ejecutó dos órdenes de aprehensión en contra de 3 personas por su probable responsabilidad en el delito de homicidio calificado, quienes, hasta este momento, fungen como mandos operativos de la Secretaría de Seguridad Pública del Ayuntamiento.
Este domingo habrá cambio de poderes en ese municipio.
Se trata, sin lugar a dudas, de un Tsunami policiaco.