De cara a la celebración de sus 90 años, el Comité Ejecutivo Nacional del PRI iniciará el camino para su reconstrucción con la renovación de su dirigente, quien mantendrá como tarea principal la reconstrucción del otrora más importante partido político del país, el cual gobernó por más de siete décadas seguidas a México.
Esta reconfiguración comenzará este miércoles con la LXIII Sesión Ordinaria del Consejo Político Nacional, en la que se definirá el método de selección para el próximo líder tricolor.
“Estamos a escasos días de que nuestro instituto político conmemore 90 años de su fundación. Esta no es la ocasión para voltear al pasado y añorar pasadas grandezas o, incluso, reivindicar antiguos momentos. Este es el momento para recuperar todo aquello que hemos hecho y nos ha llenado de orgullo en nueve décadas y plantearnos el partido que queremos ser en el futuro”, dijo la actual dirigente, Claudia Ruiz Massieu, el pasado 24 de febrero.
¿Cómo llega el PRI? El partido llega a la renovación de su dirigencia –que será hasta agosto próximo– y al 90 aniversario, el próximo 4 de marzo, con los números más bajos de su existencia: tercera fuerza política en el Congreso, 811 millones de pesos de prerrogativas, 7.4 millones de votos y 14 estados gobernados. Eso fue lo que le dejó la elección de 2018 y tras la que emprendió un camino de renovación y reconexión con sus militantes, que hasta 2017 eran 6.3 millones.
¿Qué pasará en esta sesión? Se espera que se elija el método de selección del dirigente, el cual se prevé que sea el de elección directa de los militantes. Esto ocurre tras los reproches del pasado que señalaron a un grupo por tomar decisiones en el PRI sin tomar en cuenta a las bases, incluso se responsabilizó al expresidente Enrique Peña Nieto de ello.
Ante estos reproches, Ruiz Massieu hizo un compromiso puntual: «Aquí yo les digo y les acredito el compromiso del Comité Ejecutivo Nacional: no puede haber más arreglos cupulares para definir las grandes decisiones del partido”.
También se prevé que en esta sesión se apruebe que el Instituto Nacional Electoral (INE) sea quien se encargue de la elección para que sea un proceso que genere confianza.
¿Quiénes son los interesados? Hasta el momento, el gobernador de Campeche, Alejandro Moreno, quien ya pidió permiso para dejar el cargo, y la exgobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, han alzado la mano abiertamente para dirigir al partido. No obstante también suenan los nombres del exsecretario de Salud, José Narro y del exgobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz.
En la lista también estaría la actual dirigente Claudia Ruiz Massieu, debido a que ella está terminando la presidencia que inició en 2015 con Manlio Fabio Beltrones, quien renunció a su cargo luego de la derrota de los comicios 2016. A él lo siguieron Enrique Ochoa y René Juárez, quienes tuvieron el mismo destino y fue entonces que la sobrina del exmandatario Carlos Salinas asumió el poder hasta concluir el periodo, en agosto de 2019.
¿Qué ha hecho el PRI para recuperar la confianza? Uno de los primeros pasos que dio el PRI tras el fracaso electoral de julio pasado fue salir a las calles a buscar a los militantes y recuperar sus bases, que se sintieron traicionadas cuando se eligió a José Antonio Meade, un ‘no priista’, como el abanderado del tricolor a la presidencia.
Primero comenzaron un proceso de análisis en el que convocaron a los militantes y no militantes, luego emprendieron el Programa Nacional de Gestión, “Voy al PRI”, con el que se busca dar respuesta a las necesidades de la gente.
También se inició un proceso de renovación del padrón de afiliados, pero principalmente se quiere poner a los militantes en el centro del partido.
Fuente: ADNPolítico