La Policía brasileña detuvo este martes a un tercer joven investigado por ayudar a planear la masacre perpetrada el miércoles pasado por dos tiradores en una escuela de la ciudad de Suzano, a 60 kilómetros de Sao Paulo, que dejó 10 muertos y 11 heridos el miércoles pasado, informaron fuentes oficiales.
El adolescente, de 17 años, fue arrestado en su casa y permanecerá internado en un centro de menores durante un mínimo de 45 días, con la posibilidad de prorrogar ese plazo en función de su testimonio y del resultado de los exámenes psicológicos a los que será sometido.
La detención fue autorizada por un tribunal de menores a petición de la Fiscalía, confirmaron fuentes del propio organismo.
El menor, que no ha sido identificado, fue compañero de pupitre en el instituto Raúl Brasil de Guilherme, de 17 años, quien junto a Luiz Henrique de Castro, de 25, asesinaron a cinco estudiantes, dos trabajadoras y a un tío de uno de ellos, antes de que ambos se quitaran la vida.
La Policía ya había solicitado su detención a la Justicia la semana pasada, bajo la sospecha de que «participó de la planificación» de la matanza en el colegio donde tuvo lugar el ataque, uno de los peores de la historia del país y que causó una enorme conmoción social.
Al día siguiente, el joven se presentó en compañía de su madre y prestó declaración, negó su implicación en el suceso y fue liberado al término del interrogatorio al no apreciar indicios de delitos.
Sin embargo, la Policía mantuvo que los tres planearon la matanza, en base al análisis de conversaciones registradas en sus teléfonos móviles que se han ido descubriendo con el desarrollo de la investigación.
Además, se realizaron una serie de búsquedas en el domicilio del adolescente, cuyos resultados fueron presentados en la víspera al Ministerio Público, que optó, en esta ocasión, por solicitar su arresto.
En otro frente, las autoridades analizan las imágenes de las cámaras de seguridad de una tienda de la zona este de la ciudad de Sao Paulo, donde al parecer uno de los tiradores realizó varias compras de materiales para realizar la masacre contra sus antiguos compañeros.
En este sentido, también se investiga si el tercer joven ayudó a la hora de hacer esas compras u otras.
Según la policía, el móvil de la matanza respondió únicamente a las ansias de reconocimiento y notoriedad por parte de los autores.
Querían demostrar que podían actuar como lo que ocurrió en Columbine, en Estados Unidos, con crueldad y con carácter trágico para que fueran más reconocidos», afirmó el comisario jefe de la Policía Civil de Sao Paulo, Ruy Ferraz Fontes.
La tragedia de Suzano guarda semejanzas con la ocurrida en el Columbine High School de Estados Unidos, episodio del que se cumplirán veinte años el próximo 20 de abril y que también fue cometido por dos alumnos de esa institución.
Fuente: Excélsior