La Unión Europea instó este sábado a Venezuela a celebrar elecciones presidenciales libres, transparentes y creíbles para escoger un gobierno que represente realmente la voluntad de sus ciudadanos.
“Si no hay un anuncio sobre la organización de nuevas elecciones con las garantías necesarias en los próximos días, la Unión Europea adoptará más medidas, incluido en lo referente al reconocimiento del liderazgo del país en línea con el artículo 233 de la constitución venezolana”, afirmó Federica Mogherini, jefa de la política exterior de la Unión Europea.
En tanto, España, Francia y Alemania lanzaron al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, un ultimátum de ocho días para que convoque elecciones en el país andino, o de lo contrario reconocerán al líder opositor Juan Guaidó como mandatario para que inicie dicho proceso.
“Si dentro de ocho días no hay elecciones justas, libres y transparentes en Venezuela, España reconocerá a Juan Guaidó como presidente venezolano”, anunció este sábado el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, a través de un mensaje por televisión.
En una sesión extraordinaria en La Moncloa, Sanchez insistió: “queremos democracia y elecciones libres en Venezuela. No queremos poner y quitar gobiernos. Si en ocho días no hay convocatoria a elecciones, España reconocerá a Guaidó”.
Señaló que el gobierno de su país considera a Guaidó como “la máxima representación de la Asamblea Nacional al ostentar su presidencia” y por ello es “la persona que debe liderar esa transición hacia elecciones libres”.
Sánchez reiteró el compromiso español con el pueblo venezolano. “España siempre estará con Venezuela, España siempre estará con la comunidad iberoamericana”, subrayó el mandatario, y recordó que la comunidad internacional no reconoció las elecciones de mayo pasado en las que se sustenta la presidencia de Maduro.
España ha trabajado con “cautela, responsabilidad y firmeza” en la conformación de una posición europea común favorable a la democracia y la libertad de la Asamblea Nacional venezolana, añadió luego que la víspera su gobierno propuso a la Unión Europa (UE) fijar un plazo a Maduro.
Sánchez había guardado silencio respecto a la situación en Venezuela hasta su aparición pública este sábado y de acuerdo con medios de prensa, tomó la decisión de dar un plazo a Maduro tras conocer la disposición de la canciller federal alemana, Angela Merkel, de reconocer a Guaidó si no había elecciones inmediatas.
En tanto el presidente de Francia, Emmanuel Macron, así como el vocero del gobierno de Alemania, Steffan Seibert, y la viceportavoz, Martina Fietz, expresaron en sus respectivas cuentas de Twitter su posición, la misma expuesta por el presidente del gobierno español.
“El pueblo venezolano debe poder decidir libremente su futuro. Sin elecciones en ocho días, podríamos reconocer a @jguaido como ‘presidente encargado’ de Venezuela para implementar dicho proceso político. Trabajamos conjuntamente con nuestros aliados europeos”.
La víspera el ministro francés de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, expresó su apoyo a la Asamblea Nacional de Venezuela y a Guaidó por ser un órgano “democráticamente elegido” y señaló que Francia busca una “posición unida”.
El vocero alemán anunció por su parte el viernes que el gobierno de Berlín reconocería a Guaidó si no se convocaban a elecciones de manera inmediata, mientras el ministro de Exteriores, Heijo Maas, dijo que Alemania no es neutral frente a la crisis venezolana si no está al lado de Guaidó.
El ultimátum europeo tiene lugar tres días después que Guaidó se autoproclamo presidente encargado de Venezuela en un masivo evento en Caracas, en un intento por quitar del poder a Maduro después de las controvertidas elecciones del año pasado que le dieron un segundo mandato.
Ante la posición común europea, Guaidó agradeció en Twitter el “compromiso adquirido”. “Se sigue avanzando en la Unión Europea para el reconocimiento y apoyo pleno de nuestra lucha legítima y constitucional. Agradecemos las palabras y el compromiso adquirido por el presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez”, escribió.
Fuente: La Razón