Leo Zuckermann analizó las consecuencias de que Fitch ahaya bajado la calificación de deuda de Pemex.
Era una decisión que ya se veía venir desde tiempo atrás y podría ser peor de no contar con el respaldo del Gobierno Federal, pues de los contrario quedaría en nivel de Bono Basura, y eso hace evidente que se necesita un Pemex-proa, un rescate de la paraestatal que hoy en día no es otra cosa más que una bomba a punto de explotar.