A pesar de que ayer habían bajado considerablemente las filas de migrantes, este domingo alrededor de 700 personas originarios en su mayoría de Honduras, Guatemala y El Salvador volvieron a saturar el puente internacional Rodolfo Robles con el fin de acceder a México.
Mientras esperan la tarjeta, los migrantes se bajan a bañar al Río Suchiate, que, por la temporada de estiaje, cuenta con un caudal que llega a las rodillas.
La reja que apenas hace tres meses estaba cerrada, ahora está abierta de manera temporal.
Fuente: La Razón