Familiares de cuatro personas que murieron por la explosión en un ducto de Pemex, en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo, realizaron una misa de cuerpo presente para darles el último adiós.

La misa se llevó a cabo en la Parroquia de San Francisco de Asís, en el centro de este municipio. Los asistentes piden por la salud de las personas que aún continúan hospitalizadas y que «sanen sus quemaduras”.

El sacerdote oró “por el eterno descanso de quien murió en la trágica noche del viernes y por la salud de aquellos que permanecen en los hospitales con quemaduras”.

“Pedimos (a Dios) para que nos ayude a aceptar el misterio digno de su voluntad, tal como se ha realizado con nuestros hermanos muertos y como se complica en cada uno de nosotros cuando él lo disponga”, dijo.

Pidió por “las autoridades e instituciones que han actuado ante esta emergencia para que el Señor les siga dando la fortaleza y ese espíritu de servicio”.

Los cuerpos fueron enterrados en el panteón municipal de Tlahuelilpan. ​

Fuente: Milenio