A criterio de la Comisión Instructora del Congreso del Estado, el fiscal general del Estado, Jorge Winckler Ortiz, sí incurrió en los ilícitos de tortura y desaparición forzada de que lo acusan, y por los cuales hay dos demandas de juicio político en su contra.
Los dictámenes de la Comisión Instructora que preside Rubén Ríos Uribe, fueron firmados por los diputados de Morena, Rubén Ríos y Jessica Rodríguez, mientras que el panista Enrique Cambranis votó en contra.
Ambos dictámenes ya están en la Secretaría del Congreso, confirmó Ríos Uribe, y deberán ser sometidos a votación del pleno legislativo.
En entrevista, durante la última sesión ordinaria del primer periodo, dijo que ya fueron depositados los dos dictámenes donde se declara procedente el juicio político contra Jorge Winckler Ortiz.
La próxima semana, en sesión extraordinaria del Congreso de Veracruz, será sometido a votación en el pleno.
Darán vista a la Fiscalía General de la República por hechos que pudieran ser constitutivos de delito como falsear información ante un juez federal, indicó.
«A criterio de la Comisión hubo violación a los derechos en el bien proveer de la Fiscalía, al interés público y de dieron como procedentes ambos dictámenes».
Winckler Ortiz deberá acudir al Congreso en la sesión en la que se vayan a discutir los dictámenes, los cuales marcan que debe de ser destituido de su cargo.
Con 34 votos de 50 diputados, el fiscal puede ser sometido a juicio político.
De aprobarse el dictamen por la mayoría calificada, el fiscal tendría que separarse del cargo.
«Tiene que venir al pleno a comparecer y la mayoría del pleno decidirán y todavía le queda la infancia del Poder Judicial».
Los delitos de que acusan al fiscal son desaparición forzada en contra de Francisco Zárate Aviña, ex jefe de escoltas del ex fiscal preso, Luis Ángel Bravo.
Acusa que lo mantuvieron privado de su libertad para que dijera dónde estaba Luis Ángel Bravo para poder detenerlo el año pasado.
La otra demanda de juicio político es la de Gilberto Aguirre Garza ex director de Servicios Periciales, preso en Pacho Viejo y quien acusó al fiscal y sus colaboradores por los presuntos delitos de tortura, asociación delictuosa, abuso de autoridad, incumplimiento de un deber legal, falsas denuncias y simulación de pruebas en contra de la administración de justicia.
El fiscal Jorge Winckler negó haber incurrido en esos delitos y que se defenderá y acudirá a la sesión del pleno donde se decida si lo someten a juicio político.
Fuente: Excélsior