El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, cursó invitaciones a todos los mandatarios de Mesoamérica, incluido el mexicano Andrés Manuel López Obrador, para que acudan a los actos de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que encabezará el Papa en su país.
Según confirmó aquí a Notimex Giancarlos Candanedo, vocero del gobierno panameño para la JMJ, todos los presidentes de la región han sido invitados a participar en las actividades con Francisco, previstas del 23 al 27 de enero de 2019.
“Se ha invitado a la región mesoamericana, desde México a Colombia, incluyendo República Dominicana. Todavía no se cuenta con las confirmaciones aunque, por ejemplo, el mandatario colombiano (Iván Duque) ya comprometió su presencia”, dijo en entrevista.
Agregó que también se cursó participación al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, pese a la crisis política y social que afecta a su administración. “Ojalá y nos pueda acompañar”, añadió.
La JMJ es la más grande convocatoria de jóvenes católicos en el mundo, se lleva a cabo cada tres años en diversas ciudades y cuenta con la presencia del pontífice. Será la segunda jornada que Jorge Mario Bergoglio presida en América Latina, tras la de Río de Janeiro (2013).
Candanedo reveló que, según estimaciones, en esos días llegarán hasta la capital panameña unos 300 mil jóvenes extranjeros, equivalente al 15 por ciento del total de habitantes de la ciudad, que cuenta con dos millones.
Señaló que, hasta el momento, unos 47 mil jóvenes ya concluyeron su inscripción oficial al evento mientras otros 168 mil están concluyendo la fase de inscripción. Sólo la suma de esas dos cifras da un total de 215 mil personas cuya asistencia está prácticamente asegurada.
Pero, además, otros 258 mil aún mantienen su preinscripción y aunque muchos pueden desistir, otros tantos se sumarán hasta alcanzar 300 mil, según una mirada realista.
Asimismo, la organización contabiliza ya unos 37 mil voluntarios, en su mayoría panameños, quienes brindarán su apoyo en diversas actividades logísticas. Aunque ese número puede llegar a 40 mil, los periodistas acreditados son mil 700 y los obispos del mundo que asistirán unos 400.
“Es un evento inédito para la región, ni siquiera sólo para Panamá. Nunca antes nuestro país había recibido tanta gente extranjera en tan poco tiempo. Responder a eso ha sido lo más difícil”, sostuvo Candanedo.
“Nuestro país tiene mucha experiencia en organizar cumbres, actos internacionales y tiene ese prestigio de ser un buen anfitrión, pero esto ha superado cualquier cosa. Para nosotros es un evento sin precedentes”, agregó.
De todas maneras, aclaró que tanto el comité de la Iglesia católica como el del gobierno (los cuales ya trabajan como un solo equipo), se encuentran en una fase llamada “plan de salida”, es decir que se encuentran abocados a afinar todos los detalles de lo ya programado.
Según el portavoz, los jóvenes que decidieron viajar hasta Panamá en autobús desde México pueden tener la tranquilidad de que su paso está garantizado, según los compromisos asumidos por los gobiernos de todos los países de la región al interior del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).
“Por eso el traslado terrestre y de ingreso al país está garantizado. Tanto la Dirección de Aduanas como el Servicio Nacional de Migración han mejorado sus instalaciones para facilitar el flujo”, ilustró.
“La mayor parte de las personas llegará por vía aérea, por vía terrestre desde Estados Unidos hasta Centroamérica y también a través de puentes, quizás llegando por avión a Costa Rica para moverse luego en bus a Panamá”, añadió.
Incluso afirmó que también el gobierno de Nicaragua cumplirá con lo establecido por el acuerdo del SICA, sin importar las turbulencias que ha afrontado el gobierno de ese país en los últimos meses.
Explicó que, si bien “la situación no está resuelta” y “hay que ser realistas en eso”, por el momento reina la serenidad y refrendó que, es de “interés de todos, que la Jornada Mundial de la Juventud sea un éxito.
Más adelante informó que el presupuesto del comité organizador de la Iglesia sobre los costos de la JMJ oscila en torno a 54 millones de dólares, los cuales serán sufragados con las cuotas de inscripción que darán los peregrinos sumados a los aportes de patrocinadores.
Al gobierno -continuó- le toca la inversión necesaria para garantizar aspectos de seguridad, disposición de miles de policías, enfermeros, médicos, bomberos y voluntarios de orden, aunque “una cifra económica exacta (del gasto) no se tiene”.
“El Papa ha agradecido todas las gestiones y los esfuerzos que se están haciendo para recibir a los peregrinos. Lo noté muy enfocado en la cantidad de jóvenes que van a visitar nuestro país y felicita mucho el trabajo de bienvenida”, apuntó.
Fuente: Crónica