Con su nuevo gobierno, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador aspira a liderar una transformación histórica.
Un tema recurrente en el discurso del presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), es la llamada «Cuarta Transformación».
El término se refiere a la visión que tiene López Obrador sobre su futuro gobierno.
El mandatario electo quiere situar a su sexenio, que comienza este 1 de diciembre, al nivel de otros tres momentos clave de la historia de México:
La Independencia: el movimiento armado para liberarse de los 300 años de dominio español y que tuvo lugar de 1810 a 1821.
La Reforma: la guerra entre liberales y conservadores de 1858 a 1861. Tras este conflicto surgieron las «Leyes de Reforma», entre las que destaca la separación de la Iglesia y el Estado. Benito Juárez, el personaje que más admira López Obrador, fue el protagonista central de este momento.
La Revolución: conflicto armado contra el régimen de Porfirio Díaz entre 1910 y 1917. Al final de la Revolución se promulgó la Constitución que rige actualmente en México.
Al igual que estos eventos históricos, AMLO quiere que su presidencia conlleve un cambio profundo para el país.
Y durante la campaña habló de llevar a cabo la «Cuarta Transformación», aunque en esta ocasión «de manera pacífica».
Mientras muchos ven con optimismo las promesas de una transformación, otros dudan ante las promesas de AMLO.
Hacer historia
En realidad la expresión busca marcar la pretendida relevancia histórica que AMLO quiere para su presidencia y que está presente incluso en el nombre de la coalición con la cual ganó la elección, «Juntos Haremos Historia», la cual incluyó a su partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), el Partido del Trabajo (PT) y el partido Encuentro Social.
Independientemente de si el gobierno consigue la relevancia histórica que desea AMLO, varios analistas coinciden en que los objetivos que se plantea el próximo presidente de México son bastante ambiciosos.
«Es una apuesta sumamente elevada sobre lo que pudiera ser el ejercicio del nuevo gobierno», dijo en octubre Abraham Nuncio, director del Centro de Estudios Parlamentarios de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
«En seis años se puede avanzar un poco, pero desde el punto de vista de los intereses internacionales que gravitan sobre México, pues esa cuarta transformación, si se atiene a lo que son las directrices internacionales, sobre todo en materia de economía, quedaría un tanto lejos a la conclusión del próximo sexenio», apuntó el experto.
La idea es que este 1 de diciembre, después de la ceremonia de toma de posesión, haya un festejo para marcar el inicio de esta transformación.
Mientras muchos de los seguidores de AMLO ven la idea de una «Cuarta Transformación» con optimismo, otros tantos dudan del alcance que pueda tener esta visión.
«La idea de que López Obrador realizaría una cuarta transformación de México se convirtió en un poderoso lema de campaña y ayudó a dar al candidato ese aire mesiánico que entusiasmó a tantos de sus seguidores», comentó el escritor y periodista mexicano Sergio Sarmiento en el diario Reforma.
«Sólo los historiadores posteriores podrán determinar si el gobierno de López Obrador será una gran transformación o una franca decepción. Que el próximo presidente lo pregone de antemano parece un gesto de arrogancia», señaló Sarmiento.
En cualquier caso, la expresión caló entre los partidarios y detractores de AMLO, como se puede ver en las redes sociales.
Mientras el hashtag #CuartaTransformación llegó a ser tendencia en Twitter, también cobró popularidad el crítico #TransformaciónDe4a (Transformación de Cuarta), un juego de palabras con el que algunos expresan su escepticismo ante los cambios prometidos.
El término «Cuarta Transformación» ha sido tendencia en redes sociales.
¿Pretensión o propósito?
El hecho de que AMLO se refiera a su presidencia como una transformación equiparable a tres momentos de transición históricos es para algunos una idea pretenciosa que no toma en cuenta los retos económicos, políticos y de seguridad que enfrenta el país.
«Plantearse el objetivo de cambiar al país yo creo que es loable», le comentó en octubre a BBC Mundo Jesús Ramírez, portavoz del gobierno de AMLO.
«No es una pretensión, es un propósito. Si se logra, será para el beneficio de los mexicanos y del país».
«Si bien es un propósito muy elevado, poner un listón muy alto para lo que se quiere hacer, es también una manera de hacer ver a la sociedad que estamos en una oportunidad histórica que hay que aprovechar y buscar la manera de saldar los rezagos históricos».
Independientemente de la postura que se tenga, lo cierto es que el partido Morena tiene mayoría en el Congreso mexicano desde el pasado 1 de septiembre, algo que AMLO puede aprovechar para llevar adelante los cambios que promete.
Morena, el partido de AMLO, tiene mayoría en el Congreso mexicano desde el pasado 1 de septiembre.
* Esta nota fue publicada originalmente en octubre de 2018 y actualizada con motivo de la toma de posesión de López Obrador este 1º de diciembre.
Recuerda que puedes recibir notificaciones de BBC News Mundo. Descarga la última versión de nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.
Fuente: BBC