Desprendidos del grueso de la Caravana Migrante, cientos de centroamericanos arribaron ayer a cuentagotas a la Ciudad de México.
Su arribo fue por todos los medios posibles: En cajas de tráileres, en camionetas de redilas y hasta en un remolque de automóviles, los cuales ingresaban a la capital a través de la autopista México-Puebla.
La llegada de los migrantes tomó por sorpresa a las autoridades capitalinas, que si bien los recibieron con colchas, alimentos y sanitarios, aún no tenían listos ni los consultorios móviles ni las carpas donde planean darles alojamiento.
Anoche, la mayoría de los centroamericanos dormía en las gradas y en la pista del estadio Jesús Martínez «Palillo», en la Ciudad Deportiva de la Magdalena Mixhuca.
Incluso, los que se adelantaron a la Casa del Peregrino, ubicada a unas cuadras de la Basílica de Guadalupe, fueron llevados al albergue principal en camiones RTP.
Rodrigo Abeja, de Pueblos Sin Fronteras, informó que la intención de los migrantes que se adelantaron es esperar ahora en la CDMX para reagrupar a la caravana.
«La gente que está aquí va a recibir asesoría legal y jurídica sobre sus diferentes opciones: Ya sea refugio en México o Estados Unidos, y que la decisión que tomen sea informada.
«La idea es que aquí se reúnan todos los que se han rezagado y esperamos la atención de los consulados de las diferentes naciones que tienen aquí gente caminando», dijo.
Fuente: elimparcial.com