El número de civiles muertos en dos bombardeos de la coalición internacional, liderada por Estados Unido, en las últimas 48 horas en dos localidades controladas por el grupo Estado Islámico (EI) en Siria aumentó a 41, todos familiares de extremistas, afirmó hoy una ONG.
Se han recuperado ocho cadáveres de debajo de los escombros en las localidades de Al Shaafa y Hayín, ambas localidades de la provincia siria de Deir al Zur, bombardeadas el jueves y el viernes, respectivamente, por la coalición, dijo el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Entre los fallecidos, todos familiares de miembros yihadistas y la mayoría de nacionalidad iraquí, 17 eran menores y 13 mujeres, según la ONG, cuya sede está en el Reino Unido pero que cuenta con una amplia red de colaboradores en el terreno.
Las localidades de Al Shaafa, Hayín y Al Susa son atacadas de manera habitual por la alianza antiyihadista ya que son los últimos reductos que dominan los radicales en Siria.
La coalición internacional aseguró hoy a Efe en un correo electrónico que está investigando el bombardeo que le fue atribuido ayer e insistió en que toman “medidas extraordinarias para evitar víctimas civiles” durante los bombardeos contra posiciones de los yihadistas.
La coalición anunció el pasado septiembre que al menos 1.114 civiles han muerto de manera “no intencionada” a manos de sus unidades desde 2014 en Siria e Irak, cuando la coalición comenzó sus operaciones militares contra los extremistas en ambos países.
Estos ataques se producen en un momento en el que las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada liderada principalmente por kurdos y apoyada por Washington, se preparan para lanzar una nueva fase de la ofensiva contra los yihadistas, que han ganado terreno en esa zona desértica de Deir al Zur, fronteriza a Irak.
La ofensiva fue suspendida “temporalmente” hace dos semanas por las FSD después de que Turquía atacase sus posiciones en el norte de Siria, aunque ahora EEUU está intentando mediar para rebajar “la tensión” en la zona.
Actualmente, los yihadistas dominan alrededor de un 3 % del territorio sirio y tienen presencia en las provincias de Al Hasaka y Deir al Zur, después de que hayan perdido el control de otras siete provincias desde 2017.
Fuente: 24 Horas