Amnistía Internacional (AI) denunció violaciones graves de derechos humanos por parte de las autoridades de Nicaragua contra los manifestantes del gobierno del presidente Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo.
En su informe “Sembrando el Terror: De la letalidad a la persecución en Nicaragua” la organización detalla que del 30 de mayo al 18 de septiembre se dieron múltiples irregularidades en la represión de protestas.
Sin embargo, desde la implementación de la “operación limpieza”, la administración de Daniel Ortega intensificó las detenciones arbitrarias, hostigamiento policiaco e inclusive la tortura.
AI enumera siete acciones contra el gobierno nicaragüense, mismas que niega públicamente, considerando que las cifras y datos presentados por la Policía Nacional fueron deliberadamente manipuladas.
En sus conclusiones, Amnistía Internacional pide desmantelar y desarmar a los grupos parapoliciales de forma inmediata y garantizar que las fuerzas de seguridad actúen de acuerdo a los criterios de uso legítimo, proporcional y necesario de la fuerza en contextos de manifestaciones.
Detener el discurso público que estigmatiza y criminaliza a las personas que protestan o que son vistas como opositoras al gobierno actual; asimismo, proteger y reconocer públicamente la legítima e importante labor de los defensores y defensoras de derechos humano y periodistas.
Al informe de AI se une el “repudio” expresado por el Mercado Común del Sur (Mercosur), por la creciente violencia incompatible con la democracia.
Fuente: Staff